El creador de los servicios Megabox, Mega y Megaupload, Kim Dotcom.
ReutersWELLINGTON.- Ya han pasado varios meses desde que se comenzó a hablar sobre el posible lanzamiento de Mega y Megabox, los sucesores del popular sitio para compartir archivos Megaupload. Si bien se sabe que el primero llegará el próximo 19 de enero, hasta ahora se desconocía cuando podía ser la fecha de entrega de Megabox.
Según el creador de estos servicios, el polémico Kim Dotcom, la llegada de esta herramienta que espera cambiar el rumbo de la industria será solamente unos meses más tarde que Mega.
Este proyecto de contenido musical no es nuevo, Megabox fue anunciado en diciembre de 2011 y su lanzamiento fue pausado por el allanamiento de la mansión del creador de Megaupload.
Según señalan en el sitio TorrentFreak, el año 2013 será finalmente el momento para que los servicios Mega y Megabox sean presentados al público desde el 19 de enero en adelante.
Incluso ambos sistemas ya estarían listos para ser lanzados. En el caso de servicio de música, el magnate creador de Megaupload está trabajando en conjunto con la compañía Triworks para entregar una herramienta que permita un acceso gratuito a canciones y álbumes. Esto no significa que los artistas no serán compensados, el sistema pagará a los creadores de contenido mediante un sistema de ingresos por publicidad.
Según Dotcom, este modelo de negocio incluso podría reducir la piratería de música al mismo tiempo que entregaría a los artistas las ganancias de su trabajo. Este dinero llegaría a través de Megakey, un bloqueador de anuncios pagado que en lugar de eliminarlos los sustituye en un pequeño porcentaje con anuncios de Mega. Si algún usuario no opta por esa opción también contará con una versión para simplemente comprar la música
"Estas nuevas soluciones permiten a los creadores de contenido mantener el 90% de todos las ganancias y generar ingresos significativos en el mercado de las descargas gratuitas", declara Dotcom.
Una nueva opción que según su propio creador, de resultar exitosa, podría poner un fin definitivo al sistema de sellos de música alrededor del mundo.