Sídney.- El informático alemán Kim Dotcom volvió a denunciar hoy las maniobras dilatorias del Gobierno de Estados Unidos y la industria de Hollywood para mantenerle maniatado a procesos judiciales en Nueva Zelanda.
"El Gobierno de Estados Unidos y la Fiscalía (neozelandesa) apelan cada victoria judicial que obtenemos. ¿Y después dicen que somos culpables de los retrasos?", escribió Dotcom en su cuenta de Twitter tras la vista de esta jornada en el Tribunal de Apelaciones de Nueva Zelanda.
El fiscal neozelandés David Boldt cuestionó hoy en la vista la orden del Tribunal Superior a la agencia neozelandesa que espió a Dotcom para que revele los pormenores de la operación y argumentó que ello implica un peligro para la seguridad nacional y demorará el proceso de extradición, según la radio neozelandesa.
La Oficina Gubernamental de Seguridad en las Comunicaciones (GCSB), que solo puede actuar con extranjeros, vigiló a Dotcom y el holandés Bran van der Kolk, directivo de Megaupload, entre el 16 de diciembre y 20 de enero pasado a instancias de la Policía, y esta a su vez del FBI.
El Tribunal Superior consideró ilegal la vigilancia de Dotcom y Van der Kolk porque ambos estaban en posesión en ese periodo del permiso de residencia y, por consiguiente, tenían los mismos derechos que cualquier neozelandés.
Uno de los jueces del Tribunal de Apelaciones describió de "caos procesal absurdo" el proceso que después quedó listo para sentencia.
"A mí lo que me preocupa es el retraso en el caso de extradición. El Tribunal de Apelaciones todavía tiene que dirimir al menos cinco apelaciones de Estados Unidos desde hace cinco meses", manifestó Dotcom.
El informático alemán y cuatro directivos de Megaupload fueron detenidos en Nueva Zelanda el 20 de enero de 2012 en una operación internacional lanzada por el FBI, que además conllevó el cierre del portal de descargas en Estados Unidos y el arresto de otras dos personas en Europa.
Todas las personas detenidas son buscadas por la justicia estadounidense por supuestos delitos de piratería informática, crimen organizado y blanqueo de dinero.
El FBI atribuye a Megaupload haber causado más de 500 millones de dólares (406 millones de euros) en pérdidas a la industria del cine y de la música al transgredir los derechos de autor de compañías y obtener con ello unos beneficios de 175 millones de dólares (142 millones de euros).
El próximo día 20, Dotcom cumplirá su primer año en libertad condicional, pero aún tiene parte del dinero de sus cuentas confiscado y pendiente de un proceso de extradición a Estados Unidos que se ha visto aplazado en varias ocasiones hasta el próximo agosto.