VIENA.- Este viernes se realizó la sesión número 50 de la Comisión por el uso pacífico del espacio atmosférico de las Naciones Unidas (COPUOS), parte de la Asamblea General de la ONU, donde se discutió sobre la basura espacial generada por los satélites en desuso.
El evento reunió a expertos provenientes de más de 120 países, quienes estimaron que la cifra de chatarra especial generada por humanos llegaría a un número cercano a las 17 mil unidades, de las cuales algunas podrían llegar a cambiar su órbita y dañar incluso a los satélites que actualmente están en uso o caer dentro de nuestro territorio.
Así lo confirma Eugenio González, Director ejecutivo del Centro de información de recursos naturales del Ministerio de Agricultura y actual encargado de la Agencia Chilena del Espacio, quién asistió a la Asamblea para impulsar propuestas que regulen el envío indiscriminado de material al espacio.
"Hace poco más de un año una sonda rusa tuvo varias posibilidades de caer en la Tierra. Finalmente se estrelló contra el mar, pero de nuestro territorio, frente a La isla Wellington. Yo manifesté el año pasado, en esta misma Asamblea, mi preocupación de que curiosamente muchas veces la basura espacial se estrella en el Pacífico. Esto es una constante preocupación y ni siquiera somos parte de los países responsables de esta chatarra", expresó González a Emol.
Es por esto que la Agencia Chilena del Espacio expresó en la Asamblea la necesidad de llegar a acuerdos internacionales para solucionar este problema. Algunos países como Francia o Estados Unidos ya están trabajando en la temática, buscando soluciones para desintegrar esta basura para que deje de ser una constante amenaza para la Tierra.
"Claramente debe existir una política mundial más clara y países como el nuestro, donde no contamos con esa tecnología, debemos presionar en los foros internacionales para que los responsables de esta chatarra realmente asuman el problema y comiencen a operar en busca de soluciones, porque esto es algo que va en aumento. Cada día que pasa un país informa que lanzará una nueva sonda o un nuevo satélite sin considerar que su vida útil será de siete u ocho años, ¿Qué pasará cuando el objeto deje de serles útil?", finalizó el actual encargado de la Agencia Chilena del Espacio.