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Santiago: Jueves 13 de marzo del 2025 | Actualizado 17:55
BARCELONA.- Asus sigue impulsando mezclas entre conceptos básicos de la telefonía móvil, ampliando su línea de dispositivos híbridos. En esta edición de MWC presentó oficiamente sus equipos Fonepad y Padfone Infinity.
A primera vista, el Fonepad parece una tableta Android de 7 pulgadas como cualquiera, aunque muy similar a la Nexus 7 de Google (Asus es el fabricante de ese equipo). Al prenderlo, parten las diferencias: Asus incorporó una interfaz con leves modificaciones a Android, como la inclusión de accesos directos a ciertas partes del teléfono en la pantalla de inicio, pero sin botones, haciendo que la experiencia sea un poco confusa.
Pero la característica más interesante del Fonepad, y que por algunas personas puede ser considerada la más ridícula, es que tiene la capacidad de hacer llamadas por voz, usando el mismo chip que le entrega datos. O sea, es un teléfono de 7 pulgadas.
Fuera de eso, el Fonepad funciona bastante bien. Es USD$ 50 dólares más caro que la Nexus 7 (llegando a los US$ 249 por el modelo de entrada), y fuera de ciertos problemas de respuesta en algunas instancias, parece una mejora frente a la Nexus en términos de componentes.
¿La tercera es la vencida?
El segundo gran lanzamiento de Asus hoy fue una nueva versión de su concepto Padfone. Se trata de "Padfone Infinity", un Smartphone con pantalla Full HD de 5 pulgadas que al ser insertado en una especie de carcasa, se convierte en una tableta de 10 pulgadas.
Infinity es la tercera versión del Padfone, y es la segunda de la compañía en menos de ocho meses. Pero se nota que la experimentación le sirvió.
El teléfono es muy delgado y liviano, pese a su estructura de lo que parece ser aluminio pulido. Su funcionamiento es extremadamente rápido, respondiendo muy bien a los impulsos del dedo y con una excelente resolución de pantalla.
Al insertar el equipo en el tablet, una pequeña vibración indica que la conexión se hizo y apenas un par de segundos después, la pantalla de la tableta ya está iluminada, con todo el contenido adaptado.
De ahí en adelante el funcionamiento es el de una tableta Android como cualquier otra. El concepto Padfone ha tenido errores en el pasado, pero parece que ahora Asus logró solucionar las fallas de hardware y optimizó el software para realizar su idea.
El principal problema del equipo, al menos en esta primera revisión, es su precio: cuando salga a la venta se comercializará por mil euros, cifra por la cual se puede comprar un tablet y un teléfono. Habrá que ver qué hace Asus para conquistar el mercado.
