SAN FRANCISCO.- "Solar Impulse", el avión solar desarrollado desde 2005 en Suiza, realizará su primer vuelo en Estados Unidos este sábado, en una gira de entrenamiento para realizar su meta de dar la vuelta al mundo en 2015.
Alimentado por alrededor de 12.000 celdas fotovoltaicas distribuidas por las alas del avión con el objetivo cargar las baterías del avión para que éste vuele de día y de noche sin necesidad de utilizar combustibles fósiles, el avión tiene la envergadura de un Airbus A340 y tiene el peso de un automóvil utilitario, una combinación que permite alcanzar una velocidad de crucero de 70 kilómetros por hora.
Los gestores del proyecto han realizado una gran cantidad de vuelos de prueba, la mayoría de ellas en Europa. Ahora, trasladándolo a Estados Unidos, sus gestores pretenden encontrar nuevos socios.
Alrededor del 2% de las emisiones de carbono a nivel mundial proceden de la industria aeronáutica, es por ello que la búsqueda de nuevas vías que permitan compatibilizar el transporte aéreo con el desarrollo sostenible se hace imprescindible.
"Solar Impulse" realizó este viernes un vuelo de prueba sobre la bahía de San Francisco y que, siguiendo la senda de las pruebas anteriores, ha culminado con éxito.
Si bien el avión solar aún sigue siendo un prototipo experimental y, por tanto, aún está lejos de poder extrapolarse esta tecnología a los aviones comerciales, el avión solar puede marcar un punto de inflexión en el sector aeronáutico y abrir el camino hacia aviones mucho más eficientes y, sobre todo, respetuosos con el medio ambiente.
Lógicamente, el diseño del avión tiene sus limitaciones y el fuselaje del avión es bastante ligero, un aspecto que lo hace vulnerable a los cambios meteorológicas lo que podría suponer un problema para su gira mundial.