SEÚL.- Luego de que la información circulara como un rumor esta mañana, Samsung confirmó la adquisición de Boxee, un "start up" basado en Nueva York y que contaba con oficinas en Israel, centrado en el desarrollo de software y hardware para televisores.
La historia de Boxee comenzó en 2008, cuando lanzó el primer beta de un programa que buscaba convertir el computador del usuario en un "media center", con acceso a archivos locales y canales de programación web. El software, que tuvo su lanzamiento oficial en 2010, sumó varios lanzamientos hasta 2012, cuando se anunció que la empresa terminaría el desarrollo para enfocarse en hardware.
Desde 2010, Boxee lanzó varias "cajas para televisión", que buscaban llevar la experiencia del software directamente a un televisor. El primer intento, la "Boxee Box" desarrollada junto a D-Link, no obtuvo el éxito esperado, por lo que en su último intento, la compañía intento "revolucionar" el mundo de la televisión en vivo.
La última caja de Boxee, presentada a fines del año pasado, incluyó una antena para captar señales abiertas, sumando la opción de grabar contenido de la televisión (al estilo de un DVR) pero sin almacenamiento local: todo lo grabado era guardado en la nube. Aunque fue un concepto interesante, no obtuvo buenas críticas.
Los últimos reportes sobre la compañía indicaban que Boxee seguía interesada en desarrollar productos para televisores, aunque necesitaba más financiamiento. Si bien había recaudado US$ 30 millones, ahora necesitaba más. Durante el último mes, surgieron rumores de que la empresa estaba buscando un posible comprador.
La televisión inteligente
La decisión de Samsung de comprar Boxee sorprende, porque no había reportes de negociaciones, pero es entendible. Uno de los ámbitos que más ha impulsado la surcoreana durante los últimos años -fuera de su oferta móvil- es de su línea de televisores "Smart TV".
El concepto del televisor inteligente (con capacidad para conectarse a internet y correr aplicaciones) es algo que varias empresas han buscado conquistar, pero Samsung es la que más compromiso ha mostrado. Durante las últimas ediciones de CES, la compañía ha llegado con varios modelos sumando soporte para Netflix, aplicaciones para videollamadas e incluso juegos.
El problema es que la experiencia nunca ha sido del todo buena. Problemas de velocidad y control han plagado a este mercado. Además, el hecho de que Samsung lance una nueva versión de su Smart TV todos los años no tiene el mismo impacto que tener un nuevo Galaxy S cada otoño: la gente no cambia de televisores tan seguido como lo hace con sus teléfonos.
Aunque por ahora no hay claridad de qué va a hacer Samsung con Boxee, sí se ha especulado que la compañía buscaría mejorar su oferta de software para televisores. La empresa ya presentó un "kit" para actualizar los televisores Smart más antiguos, por lo que la opción de que uno de ellos incluya la oferta de Boxee (popular en algunos segmentos del mercado), no sería algo extraño.