WASHINGTON.- En ocasiones, los antiguos egipcios embalsamaban trozos de carne para sus muertos casi con el mismo esmero que las propias momias humanas, según publicó hoy la revista Actas de la Academia Estadounidense de las Ciencias (PNAS).
Un equipo de expertos liderado por Katherine Clark, de la universidad británica de Bristol, investigó la composición química de los tejidos y vendas de cuatro trozos de carne embalsamados hace entre 1.400 y 1.000 años antes de Cristo.
Resultó que estos trozos habían recibido tratamientos muy distintos, pues hallaron entre otros diferentes tipos de grasa animal y restos de cera.
Especialmente llamativa era una costilla de vaca hallada en la tumba del matrimonio Juja y Tuja, en el Valle de los Reyes. Los investigadores encontraron resina de pistacho, un caro artículo de importación considerado un lujo en el antiguo Egipto.
Su uso, por ejemplo para fumar, estaba reservado a reyes y la clase más alta. Sólo rara vez se encuentra resina de pistacho en momias humanas. Según asumen Clark y sus compañeros, quizá sirviera para hacer más sabrosa la carne.