WASHINGTON.- Un problema en el flujo de agua obligó este martes a la agencia espacial estadounidense (NASA) a posponer el lanzamiento de un satélite para medir los niveles de dióxido de carbono en la atmósfera, el gas con mayor incidencia en el calentamiento climático.
El satélite, denominado Orbiting Carbon Observatory-2 (OCO-2), debía ser lanzado a las 09H56 GMT desde la Base Vandenberg de la Fuerza Aérea, en California (oeste). Pero la operación fue detenida 46 segundos antes del lanzamiento debido a un problema con el flujo de agua del cohete, indicó la NASA.
La ventana de lanzamiento para este martes era apenas de 30 segundos. El tiempo de lanzamiento debía ser muy preciso de modo que el satélite pudiera unirse al A-Train, una constelación de otros cinco satélites internacionales para la observación de la Tierra.
La NASA proporcionará más tarde este martes detalles sobre la naturaleza del problema y la nueva fecha y hora del lanzamiento, dijo el comentarista de la agencia George Diller.
Intentos previos de la NASA de lanzar satélites de carbono fracasaron en 2009 y 2011.