VALENCIA.- Durante años, la tecnología ha intentado mejorar la seguridad de los automovilistas en sus viajes. Pero uno de los factores que no se ha logrado solucionar es el de la fatiga, que provoca cientos de accidentes al año luego que los conductores se queden dormidos mientras están al manubrio.
Un proyecto europeo que reúne a universidades, empresas y centros de investigación está tratando precisamente este punto, creando un dispositivo que pueda notar y alertar cuando el conductor está quedándose dormido.
Ahora, el Instituto de Biométrica de Valencia (IBV) presentó los primeros avances de la iniciativa, bautizada como "Harken", sigla en inglés "sensor no introsivo de corazón y respiración en el automóvil".
La entidad española anunció que concluyó las primeras pruebas en circuito cerrado de un sistema que, usando sensores instalados en el asiento y en el cinturón de seguridad, puede seguir el estado del conductor.
Según explicó José Solaz, director de innovación en los mercados de autos y transporte masivo del IBV, "las variaciones en el ritmo cardiaco y la respiración son buenos indicadores del estado del conductor ya que se relacionan con la fatiga. Cuando la gente entra a un estado de fatiga, aparecen modificaciones. Harken puede monitorear esas variables y así alertar al conductor antes de que se instalen esos síntomas".
El desarrollo es el primero en el mundo capaz de medir esas características de una forma no instrusiva, en un auto en movimiento y afectado por las vibraciones y movimientos del usuario.
Según indica la entidad en su sitio web, el resultado del trabajo es un prototipo totalmente funcional que ya ha sido probado en pistas cerradas y que además de los sensores incluye una unidad de procesamiento. Pronto se iniciarán el condiciones de tráfico real y por ahora no hay información clara sobre una posible llegada al mercado.