WASHINGTON.- Los dispositivos con sistemas de realidad virtual, como Google Glass, pueden causar una obstrucción parcial de la visión periférica, según un estudio publicado en la edición de noviembre de la revista científica "Journal of American Medical Association" (JAMA).
Los investigadores señalan que, aunque el uso de este tipo de sistemas de visualización está aumentando entre el público, se desconoce con certeza su efecto sobre la visión, por lo que seleccionaron una pequeña muestra de usuarios para analizarlos.
El campo visual periférico es un componente principal de la visión esencial para actividades como conducir, la seguridad de los peatones y la práctica de deportes.
El equipo investigador, liderado por Tsontcho Ianchulev, oftalmólogo y profesor en la Universidad de California (San Francisco), realizó pruebas de campo visual estándar a tres individuos con una agudeza visual considerada normal (20/20) y un campo visual también dentro de los estándares comunes.
Los participantes usaron el dispositivo de Google, que permite la navegación por internet, graba videos y toma fotografías, según las instrucciones del fabricante, que indica un período de aclimatación de 60 minutos. Además, a esas personas se les efectuó una medición del campo visual perimetral.
Posteriormente, les hicieron la prueba con una montura de gafas comunes con un color y una anchura similar al dispositivo de Google.
Las pruebas de campo visual demostraron que los tres participantes experimentaron puntos ciegos (escotoma) mientras usaban el dispositivo, que provocaron una obstrucción clínica "significativa" en el campo visual del cuadrante superior derecho.
El equipo de Ianchulev analizó además 132 imágenes de los usuarios con este producto en posición de frente mirando a la cámara, y detectaron que un gran número de las personas usa el dispositivo cerca o en superposición de su eje pupilar, lo que puede provocar puntos ciegos e interfiere en la visión.
Los autores reconocen que el estudio está limitado por el pequeño número de participantes, "que pueden no ser representativos de todos los usuarios", y apuntan a que se necesitan más muestras para identificar los factores que influyen en el tamaño y la profundidad del escotoma.