MONTEVIDEO.- El concentrado de fósforo y nitrógeno presente en los excrementos de murciélago acelera la floración de las plantas, una propiedad conocida por los productores de marihuana y que ahora estudia un grupo uruguayo de investigadores con el objeto de comercializarlo como abono orgánico.
"No tiene nada que ver con la marihuana, es fertilizante", aseguró el zoólogo Enrique González, coordinador del Programa de Investigación de Murciélagos de Uruguay, que actualmente analiza la materia fecal de estos mamíferos, conocida como guano, para lanzarla al mercado agrícola.
No obstante, González reconoció que este abono debe tener "alguna particularidad" para los productores de cannabis, que, por ahora, les ha servido para atraer la atención de los medios de comunicación uruguayos hacia su actividad académica.
El pasado diciembre Uruguay aprobó el Proyecto de Ley sobre Control y Regulación de la Marihuana y sus Derivados, que legalizó la producción y venta de esta sustancia y desde agosto cualquier ciudadano que desee cultivarla en su casa puede acudir a una oficina de correos y solicitar una licencia de productor.
Una vez se le conceda, estará habilitado para cultivar libre y legalmente hasta seis plantas de cannabis y cosechar hasta 480 gramos de marihuana al año para su consumo personal.
Al inicio de la investigación, "pusimos en internet guano de murciélago y nos salieron 25 páginas, de las cuales 22 eran de clubes de plantadores de marihuana en todo el mundo", dijo el investigador.
Comparado con otros fertilizantes, "devuelve la materia orgánica a la planta y la absorción de nutrientes se hace más lentamente, por lo que te permite no tener que abonar cada día", explicó Nacho Merlín, gerente de un "growshop" uruguayo que vende productos para la plantación de cannabis y asesora a sus cultivadores.
"Estaríamos interesados" en vender un abono producido en Uruguay, porque lo que se encuentra en el mercado del país son productos importados y caros, aseveró.
Radicado en el Museo de Historia Nacional de Montevideo e integrado en la Red Latinoamericana para la Conservación de los Murciélagos, el grupo científico que lidera González trabaja para la investigación y conservación de esta especie animal, tan mitificada y estigmatizada por la cultura popular.
La gente que lucha para la protección de aves, ballenas o ciervos no padece "el terrible problema al que nos enfrentamos nosotros, porque nuestro animal está demonizado injustamente", criticó.
La puesta a la venta del guano servirá para financiar al grupo, explicó el estudioso, quien defendió que "si desaparecieran todos los murciélagos de un día para otro, las poblaciones de insectos explotarían de tal manera que nos taparían".
En Uruguay habitan 23 variedades diferentes, tanto en ciudades como en zonas rurales, indicó el zoólogo, quien pretende establecer unas directrices responsables para su explotación.
"Si un club de cannabis va a buscar guano a una colonia, no va a volver un año más tarde para ver si fue afectada por la extracción, sino que volverá cuando se acabe, a por más", advirtió.
La recolección debe ejecutarse fuera del período reproductivo, que empieza en diciembre hasta finales de enero o febrero, y en días fríos para que los murciélagos estén aletargados, incidió.
Por otra parte, concretar el aspecto legal, económico y sanitario de este fertilizante, antes de insertarlo al mercado, es fundamental para este grupo de científicos.