SAN FRANCISCO.- En medio de una controversia desde que uno de sus dirigentes amenazó con indagar en la vida de los periodistas que critican su servicio de pedido de taxis, Uber anunció la contratación de un equipo para proteger mejor los datos personales de sus clientes.
La empresa precisó que este equipo será dirigido por Harriet Pearson, abogada de la firma Hogan Lovells.
La medida tiene como fin acallar las críticas de los que temen que Uber espíe a los usuarios del servicio, haciendo seguimiento de las idas y venidas de periodistas que se reúnen con fuentes confidenciales.
"Nuestra actividad depende de la confianza de millones de pasajeros y conductores que utilizan Uber", subrayó la firma en un mensaje publicado en su blog oficial.
"El historial de desplazamientos de nuestros clientes es una información importante y comprendemos que debemos tratarlo con atención y respeto", añadió.
Por lo tanto, indicaron, el nuevo equipo llevará a cabo "una evaluación en profundidad de nuestro sistema para proteger los datos privados y hará recomendaciones para mejorarlo".
La polémica surgió a raíz de que uno de los vicepresidentes de Uber, Emil Michael, hiciera un llamado a indagar en la vida de los periodistas que investigan elementos comprometedores de la empresa para acallar sus críticas contra el grupo.
Uber terminó disculpándose por estos comentarios en su cuenta de Twitter, asegurando que ésa nunca fue la idea de la compañía y que jamás lo será.
Su director, Travis Kalanick, dijo incluso este martes en un mensaje de Twitter que "los comentarios de Emil en una cena reciente son una calamidad y no representan al grupo".
El asunto saltó a la palestra política este miércoles después de que el senador estadounidense, Al Franken, presidente de una subcomisión sobre la vida privada, la tecnología y la ley, escribiera una carta a Kalanick sobre una serie de cuestiones en relación a los comentarios de Emil Michael y sobre el acceso de los dirigentes de Uber a datos relativos a los desplazamientos de sus clientes.
Uber, cuya sede se encuentra en San Francisco, permite a sus clientes, gracias a una aplicación para teléfonos inteligentes, pedir un taxi o auto privado a tarifas muy asequibles, y se ha vuelto un gran éxito. La aplicación está disponible en Chile desde este año.
Fundada en 2009, la empresa está presente en 200 ciudades y 45 países, y ha desatado tensiones con taxistas profesionales, especialmente en Europa.