El esqueleto encontrado estarían sobre los restos de Alejandro Magno
Reuters
ANFÍPOLIS.- Es posible que nunca se averigüe la identidad del esqueleto localizado en una antigua tumba del norte de Grecia, admitieron hoy arqueólogos griegos, después de que el descubrimiento del mismo alentase las especulaciones sobre el lugar donde podrían descansar los restos de Alejandro Magno.
"Puede que nunca sepamos quien es", afirmó la secretaria general del Ministerio de Cultura, Lina Mendoni. "Podremos realizar pruebas que determinen si los restos eran de un hombre o de una mujer, la edad de la persona y lo que comía, pero puede que nunca sepamos la verdadera identidad del ocupante de la tumba", agregó.
Fuentes oficiales habían asegurado que la tumba localizada en Anfípolis pertenecía seguramente a una figura pública masculina, o a un general, haciendo que se desataran las especulaciones respecto a la posibilidad de que se tratase del enterramiento de Alejandro el Grande, cuya ubicación es uno de los grandes misterios de la arqueología.
El rey de Macedonia falleció en Babilonia el año 323 antes de Cristo, cuando tenía 32 años. Algunos expertos opinan que probablemente fue enterrado en Alejandría (Egipto), pero tanto su mujer, Roxana, como su hijo, Alejandro, se exiliaron en Anfípolis, donde fueron asesinados junto con otros miembros de la familia.
Según Mendonia, la mayor parte del trabajo de campo en la tumba de Anfípolis ya concluyó, aunque ahora los arqueólogos necesitarán meses para llevar a cabo análisis de los hallazgos.
Los análisis "determinarán si los expertos serán capaces de tomar muestras de ADN del esqueleto encontrado en Anfípolis y compararlo con las muestras de ADN de la tumba en Vergina de Filipo II de Macedonia para determinar si hay algún nexo familiar directo", apuntó la funcionaria en referencia al padre de Alejandro Magno.
"Aunque el esqueleto que acabamos de encontrar está en buen estado, el esqueleto encontrado en Vergina data de 1975 y lo más probable es que desafortunadamente cualquier prueba de AND que se haga ahora recoja el ADN de la últma persona que lo tocó", agregó.
Según el ministro de Cultura griego, Konstantinos Tasoulas, todavía no se decidió qué universidad u organización realizará los análisis al esqueleto, aunque se tratará de especialistas griegos.
"Se encontraron dibujos de figuras humanas en las paredes y columnas de la tumba y esperemos que eso nos ayude a arrojar luz apra saber a quien perteneció", afirmó Tasoulas.
El esqueleto fue localizado en un ataúd de madera rectangular en la tercera cámara de una enorme tumba, a unos 1,6 metros bajo la superficie abovedada. Las evidencias halladas apuntan a que la tumba fue saqueada en la antigedad.
En la excavación también se descubrieron esculturas con forma de mujer, estatuas de esfinges y un gran mosaico en el suelo que data de entre los años 356 y 323 antes de Cristo.
Según el Ministerio de Cultura, es poco probable que la tumba pertenezca al propio Alejandro Magno, pero no obstante se trata de la más importante de su clase jamás descubierta en Grecia.