SANTIAGO.- El perito adjunto de la parte querellante, Luis Fornazzari, dejó entrever que el diagnóstico que emitió sobre el estado de salud de Augusto Pinochet es
demencia leve a moderada y que el deterioro mental de Pinochet no lo liberará de ser sometido a proceso por incapacidad mental. "Pinochet, no está loco, y eso lo sabemos todos", afirmó.
El doctor Luis Fornazzari, neurólogo y siquiatra, es director clínico de la Unidad de Neurosiquiatría de la Universidad de Toronto, Canadá, y vino a Chile como perito adjunto de la parte querellante en el caso "Caravana de la Muerte", para evaluar las capacidades mentales y sicológicas del general (r) Augusto Pinochet.
Por primera vez se encontraba frente a frente con el desaforado senador vitalicio, con el mismo que lo exilió en su gobierno. Sin embargo, el médico dice que ya no hay rencores; "la relación con el general en estos cuatro días fue muy buena. Nunca hubo un sí o un no, no hubo irritabilidad, no fue un paciente difícil y él siempre respondió en forma muy positiva. Me siento muy feliz de haber participado en esta labor, creo que mi trabajo fue extraordinariamente profesional".
Entremos en materia y cuéntenos en qué se diferencia la demencia encefálica de la senil
Son conceptos muy, muy actuales. Demencia en general es una enfermedad cerebral en la cual uno de los factores más importantes corresponde a la pérdida de memoria, juicio, razonamiento, cálculo, orientación, y sobre todo de las llamadas funciones ejecutivas, es decir, lo que el paciente decide decir, hacer, prever. Es una enfermedad cerebral que tiene una base neuropatológica muy precisa y que exige una serie de variedades y formas de demencia, que son mucho más frecuentes con la edad, pero no absolutamente restringidas a la senilidad. Lo más importante para nosotros es hacer el diagnóstico diferencial de la demencia.
¿Se relaciona con locura y/o sicosis, el concepto anterior?
No, es otro concepto. Locura o sicosis es estar alejado de la realidad, es de causa cerebral, pero con frecuencia afecta a la gente más joven. Algunos ejemplos típicos son la esquizofrenia, la enfermedad maníaco-depresiva, en el cual el paciente está fuera de la realidad, piensa que la gente lo está persiguiendo, que lo miran, escucha voces, ve cosas donde no hay. En otras palabras, no está consciente del mundo real.
Rastros de estas dolencias fueron los que ustedes indagaron en el general Pinochet.
Exactamente, a nosotros se nos pidió, y a mí personalmente, analizar si el paciente tenía una demencia, el grado de demencia, qué clase de demencia y si tenía algún grado de sicosis.
El general en realidad no tiene ningún grado de sicosis, eso se eliminó rápidamente.
Sin embargo los exámenes que se le hicieron en Londres concluyeron que Pinochet no podría soportan un juicio en su contra porque no estaba apto ni síquica, ni físicamente. ¿Qué opinión se ha generado usted al respecto?
Una de las razones de por qué estoy yo aquí, es porque los exámenes que se hicieron en Londres fueron muy, muy insuficientes para un diagnóstico, ya sea de demencia o sicosis. Lo segundo es que prácticamente ninguno de los expertos londinenses tenía mucha expedición en lo que se llama demencia y, tercero, lo hicieron en forma bastante rápida, fueron test de tres sesiones de una hora y media o dos horas cada una como máximo.
Si bien en Chile las pericias duraron más días, ¿garantiza ello una mejor evaluación? ¿qué criterios se emplearon para evaluar?
Aquí lo que hicimos, junto al Instituto Médico Legal, fue establecer criterios de diagnóstico que se basaron en normas internacionales aceptadas como demencia o sicosis. Se usaron los test neurosicológicos más actuales y adecuados, que casi todos están validados en Chile. Con estos antecedentes, el asesoramiento nuestro, con esta multivariedad de tests -incluyendo un scanner cerebral, un electroencefalograma, una batería extensa de test neurosicológicos- nos permiten decir que aquí hubo un proceso muy bien hecho desde el punto de vista técnico.
¿Serán concluyentes los informes que emanen de los exámenes?
Yo creo que sí. Se usaron los mejores procedimientos y criterios de diagnóstico, por lo que las conclusiones que van a saber en un par de días en el informe, que se hará público, serán mucho más efectivas que las de Londres.
Algunos medios informan que Pinochet tendría una demencia leve a moderada, ¿significa que no podría ser juzgado, por ejemplo?
No sé si es eso lo que el informe va a decir. De todas maneras las demencias son muchas y en orden de lograr una efectividad en los tratamientos tenemos escalas para la graduación entre leve, leve a moderada, moderada, moderada a severa.
Pero, ¿podría ser juzgado el general (r) con un diagnóstico leve a moderado?
Obviamente las demencias no son una cosa global. Una demencia como el Alzheimer, de leve, a leve-moderada, es muy predecible saber qué vas a encontrar en el paciente en determinado momento. Hay una marcada deficiencia en la memoria, sobre todo en memoria a largo plazo. Pero en las demencias debido a problemas de mini infartos o micro infartos, la memoria no es tan importante.
¿Por qué no?
Porque son generalmente demencias llamadas subcorticales, que dejan casi sin afectar la corteza. Es otro tipo de déficit, no hay problema de memoria a largo plazo. Sí hay una dificultad en manejar esa memoria a largo plazo, es decir, cómo emplearla en un momento mejor que en otro.
Pero en el caso del general Pinochet...
... Yo lamentablemente estoy bajo juramento, firmé unos documentos. Puedo decir que se hizo la mejor evaluación posible.
Pero no está usted descartando que el senador desaforado padezca algún tipo de sicosis o locura. ¿Los grados avanzados de demencia tampoco los padece?
(...) No, ustedes saben que él no sólo habla y se moviliza con cierta dificultad. El mantiene diálogos, se ve bien compuesto. Obviamente no tiene el grado extremo de demencia.
La demencia moderada en Canadá con las apreciaciones legales que usted tiene de estos exámenes, ¿hacen posible juzgar a una persona?
Sí, van a juicio, incluso yo he tenido algunos pacientes con Alzheimer de grado leve a moderado que por alguna razón se molestaron con otra persona y la agredieron y la familia del agredido lo demandó, lo juzgaron y lo condenaron. Obviamente no lo pusieron en la cárcel, pero tuvo su castigo. Aquí no hay razón de tipo humanitaria, ¿por qué tendríamos que discriminar a favor de uno u otro? Esta persona no se puede escudar en su dificultad para comprender ciertas cosas para agredir a sus pares o a personas normales.
Sabemos que Pinochet lo reconoció, que hablaron sobre Iquique, sobre quién era el responsable del progreso de esa ciudad: si él o el alcalde Soria.
El sabía que yo era de Iquique, por alguna razón él asociaba mi nombre. Hay muy pocos Fornazzari en Chile. Cuando hablamos sobre el desarrollo de Iquique, entramos en una conversación media complicada porque yo soy amigo del "Choche" Soria, entonces le dije que mi amigo era quien había dado el real impulso a la ciudad en esa época (...) Ahora no sé lo que ocurrió después de que yo me fui de Chile. Pero hubo un diálogo muy activo.
Entonces, en ese episodio, demostró memoria...
En ese episodio demostró memoria y en otros también, pero eso no descarta que no esté con todas sus funciones intactas. Por eso digo que hay demencias donde el principal problema es la memoria; hay otras en que lo es el juicio, el razonamiento, el anticiparte a ciertos hechos. En el diagnóstico de demencia, según los criterios internacionales, para hacer el diagnóstico no se precisa un scanner cerebral. El diagnóstico se hace desde el punto de vista clínico, de la historia del paciente, del examen neurológico y sobre todo de la batería de test neurológicos.