SANTIAGO.- El ministro secretario general de Gobierno, Claudio Huepe dijo que ayer "fue un día triste para la democracia" no sólo por el funesto resultado sobre la búsqueda de restos de detenidos desaparecidos, sino también por la postura de parlamentarios de oposición en orden a no aprobar el proyecto de ley sobre transparencia, límite y control del gasto electoral.
A juicio de la autoridad este rechazo representa una burla a los chilenos y a la situación económica de los ciudadanos con niveles de pobreza importantes.
Claudio Huepe sostuvo que, producto de este revés, en la próxima campaña electoral se apreciará un despliegue inaudito de recursos. Agregó que los dichos de la derecha en cuanto a que contribuiría a legislar sobre la materia han quedado en nada.
El secretario de Estado puntualizó que el Ministro del Interior había aceptado indicaciones hechas por los propios parlamentarios de la oposición como las de aumenar el nivel del gasto electoral a 80 millones de pesos y también de procedimientos y, "así, ellos lo rechazaron", hecho que calificó de "increíble".
Según el titular de la secretaría general de Gobierno "aquí se está haciendo jugar al dinero un rol perverso en la política por lo que esperamos que la opinión pública tome esto claramente en cuenta".
Huepe ratificó que es imposible que el referido proyecto se convierta en ley, porque requiere un quórum muy alto y en el Senado precisa necesariamente la participacion de la oposición.
Por último, destimó que la ausencia de cuatro o cinco parlamentarios de la Concertación en la sala haya contribuido a este fracaso.
Dijo que Chile gasta en una campaña elctoral mucho más recursos que los que se emplean en los Estados Unidos o en un país europeo, lo que calificó de "absolutamente inadmisible" por lo que espera que la oposición recapacite en su votación en el Senado.
Huepe desvirtuó que este hecho rompa las relaciones del Gobierno con la derecha, porque siempre se tendrá que trabajar con ellos para tratar de impulsar cualquier tipo de legislación, sin embargo, admitió que daña la confianza.