SANTIAGO.- El embajador de Chile ante la ONU y ex canciller, Juan Gabriel Valdés manifestó hoy su satisfacción por el procesamiento del general (r), Augusto Pinochet dictado por el ministro de fuero Juan Guzmán Tapia.
En entrevista telefónica con Televisión Nacional, Valdés señaló que finalmente se cumplió la promesa y objetivo asumidos por el gobierno del ex Presidente Eduardo Frei Ruiz Tagle de traer a Chile al senador desaforado para juzgarlo en el país.
"No me arrepiento de haberlo hecho (traer de vuelta a Pinochet), al contrario, siento hoy día una profunda satisfacción de que sea en Chile donde este proceso se haya desarrollado y se haya hecho de manera tan limpia", agregando que este paso promueve el respeto de la comunidad internacional a la forma en que Chile ha llevado a cabo el proceso y a la vez demuestra la "fe en la dignidad" del país.
Añadió que la lucha de los familiares de detenidos desaparecidos, de los abogados querellantes y el debate producido a raíz del caso han sido un factor que ha "levantado el prestigio de Chile en el exterior".
Asimismo, el ex ministro de Relaciones Exteriores reconoció que pese a todos los esfuerzos realizados por su cartera y la anterior administración en el caso de los derechos humanos no fue el suficiente, debido a que el tema no fue muy considerado, indicando que el diálogo con los familiares de las víctimas fue "difícil y complejo" pero dentro de un marco de respeto y comprensión.
Por último, Valdés descartó que el fallo que somete a proceso y mantiene bajo arresto domiciliario al ex comandante en jefe pueda producir inestabilidad en la economía del país.
