SANTIAGO.- El ex ministro del Interior Sergio Onofre Jarpa, junto con denunciar que "no es posible que no haya claridad en la aplicación de la amnistía y de la prescripción", aclaró que nunca escuchó algún reclamo proveniente del Poder Judicial acerca de obstrucción a causas sobre derechos humanos, mientras permaneció en su cargo ministerial.
En entrevista a radio Agricultura, Jarpa aclaró que dejó abierta la posibilidad de "comunicaciones personales y directas si surgía algún problema", pero nunca, mientras estuvo en esa repartición, le llegó ningún "llamado, observación o reclamo".
Asimismo, subrayó que si no se aplica la prescripción es posible "seguir escarbando hasta la guerra civil del '91 o más atrás" a pesar que según la legislación chilena "siempre estaban prescritos (los hechos) a los 15 años. Echaron abajo la prescripción y no hay tope", recalcó.
Posible querella
Respecto de los anuncios sobre que él podría ser objeto de una querella, el ex ministro aseguró que no tiene nada que ocultar a los tribunales. No obstante, precisó: "Otra cosa es aceptar que las leyes que han beneficiado a la gente de la Unidad Popular en más de mil casos, como es la amnistía y la prescripción, no se pueden aplicar a la gente de las Fuerzas Armadas, por ejemplo, ni tampoco a los civiles que apoyaron al gobierno de las Fuerzas Armadas y de orden, eso es inaceptable".
Consultado si coincide con la opinión del Presidente Lagos en cuanto a que se debe dejar actuar a los tribunales, respondió afirmativamente, aunque aclaró que a éstos "le cambiaron la interpretación de la ley de amnistía, lo que me parece curioso porque siempre han sido muy celosos de su independencia".
Jarpa enfatizó que hay una gran confusión en este caso, ya que cada juez puede "buscar interpretaciones diversas a la misma ley". Por ende, dijo, "tenemos que en algunos casos se aplica la prescripción y en otros no, entonces yo creo que ahí sí debería haber una clarificación mediante un pronunciamiento del Gobierno, de la Corte Suprema, porque no puede ser que en un país, según el juez que le toque a uno, se es culpable o inocente por hechos similares".
Frente al informe de las FF.AA. que revela que algunos detenidos desaparecidos fueron arrojados al mar dijo que "lamentablemente caímos en una lucha de odiosidades".
Consultado si tenía conocimiento de estos hechos respondió que "no habían antecedentes" al respecto, y explicó que estos sucesos "no estaban en el tapete", porque en el año '78 se dictó la Ley de Amnistía.
"Entonces partíamos de la base que los hechos ocurridos hasta ese año estaban cubiertos por dicha ley y, por lo tanto, estábamos trabajando sobre los hechos que ocurrieron después, y que eran actos terroristas, asesinatos de Carabineros. Pero este tema no estaba presente ni en las conversaciones, ni en las investigaciones que se estaban haciendo", enfatizó Jarpa.
El ex secretario de Estado opinó que actualmente se está profundizando la "división del alma nacional", precisando que "cada uno está buscando o la venganza o sus intereses o la permanencia en el gobierno, y el pueblo chileno ahí está enfrentando los problemas sin que nadie ponga orden y solución".
Dijo que en torno a la solución de los juicios pendientes por el tema de los derechos humanos, dos presidentes intentaron ponerle término "mediante alguna reforma legislativa, y en ambas oportunidades se opusieron los socialistas".
Cardenal Errázuriz
Requerida su opinión en cuanto a si cree que surgen nuevas expectativas de unidad en torno al cardenal Francisco Javier Errázuriz, manifestó su esperanza que ello ocurra, "y dejemos que los problemas pendientes o no pendientes, porque ya debieran estar borrados por la Ley de Amnistía y la prescripción, se resuelvan en donde deben resolverse, aplicando las leyes que deben aplicarse: en los tribunales de justicia".
"Pero no hagamos -prosiguió- un juicio histórico que nos va a llevar de nuevo al enfrentamiento y a abrir los antecedentes que llevaron a Chile a la mayor crisis política e institucional que ha tenido en su historia".