SANTIAGO.- El presidente del instituto Libertad, José Antonio Guzmán, y el secretario general de Renovación Nacional, Rodrigo Hinzpeter, dieron a conocer hoy un balance que el organismo hizo del primer año de gobierno Ricardo Lagos, calificando este período de "paradójico".
"Se agudizaron el desgaste concertacionista y los problemas heredados de los anteriores gobiernos, pero un despliegue comunicacional exitoso permitió al oficialismo sortear con relativo éxito la elección municipal de octubre pasado", añadió.
El estudio consideró que el actual jefe de estado "heredó una compleja situación política, económica y social generada por una ageda de transición a la democracia aún pendiente y un mal manejo de crisis".
Según el análisis, la coalición enfrenta un serio desgaste que ha limitado "el campo de acción del Presidente Lagos, quien aún no ha sido capaz de imponer su liderazgo sobre las falencias de su soporte político y se ha supeditado a los apremios electorales del sector del arco iris".
En lo económico, se consideró que las autoridades han debido "asumir graves errores en sus estimaciones, que impidieron el cumplimiento de las metas trazadas". Además, se agrega que el estancamiento se vio agravado por la decisión del gobierno de impulsar proyectos técnicamente cuestionados.Así iniciativas emblemáticas, como las normas sobre evasión tributaria y el seguro de desempleo, "han sido utilizadas como instrumentos de ideologización del debate público".
Además, se puntualizó que los estudios de opinión pública han mostrado un claro descenso en las expectativas de la gente y en la evaluación del propio gobierno. Sin embargo, ese deterioro no parece afectar la imagen presidencial, que mantiene niveles de aprobación cercanos al 60%.
Según se planteó, no resulta extraño que -para enfrentar la sucesión de elecciones que empezó con la municipal pasada- La Moneda concentrara su estrategia en la figura de Lagos "lo que produjo una sobreexposición mediática y una intromisión en áreas ministeriales".
Al respecto, el estudio advierte que "este escenario de comunicaciones y la constante estrategia electoral de la Concertación no han otorgado beneficios concretos para el país. Al contrario, sólo logran desinformar a la opinión pública y exponer a Chile a los riesgos de la videopolítica, donde las decisiones se adoptan por su efecto en la opinión pública más que por el bien del país".
"En el largo plazo, este problema generará una distorsión entre los problemas reales de la gente y la desinhibida e imprudente actitud del gobierno, que pretende celebrar en las calles el primer año de su mandato, con las autoridades en juerga mientras 500.000 personas se encuentran desocupadas", concluyó.
