SANTIAGO.- El Pleno de la Corte Suprema acordó, por unanimidad, destituir de su cargo al ministro Luis Correa Bulo. La decisión se tomó luego de cuatro horas de reunión en la que estuvieron presentes 17 de los 21 ministros del Máximo Tribunal.
En un trámite que duró menos de cinco minutos, a las 15:35 horas, llegó al domicilio del destituido juez la secretaria subrogante de la Suprema, Marcela Paz Urrutia para informarle oficialmente de la resolución.
La notificación, redactada en sólo una carilla, fue entregada al abogado e hijo del ex ministro, Luis Correa Bluas.
Correa Bluas dijo que en la resolución del Máximo Tribunal no se logró probar ninguno de los cargos por tráfico de influencia que se le hizo al ministro Correa Bulo.
Anunció que el lunes recurrirán a esta resolución.
Esta mañana, al retirarse el ministro José Benquis de los Tribunales luego del fallo, calificó de "lamentable" la situación, y agregó que debía notificarse primero al afectado.
Por su parte, Luis Correa Bluas dijo luego de conocer la resolución que "no me cabe duda de que este fallo fue tomado con antelación y de alguna manera nosotros lo esperábamos, lo que no quiere decir que no lo lamentemos profundamente".
Agregó además que "el ministro Correa Bulo ha sido removido con una tremenda animosidad de un sector de la Corte Suprema. Hubo presiones sin lugar a dudas, hubo presiones violentas para obtener un resultado procesal en perjuicio de Correa, y eso es lo que en doctrina se llama precisamente tráfico de influencias".
Correa Bluas sostuvo que van a solicitar un recurso de reposición ante la Corte Suprema, aunque "todos sabemos la resolución que va a tomar el tribunal cuando el ministro recurra".
Adelantó que "no descartamos presentar un recurso ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos o ante los organismos internacionales que se requiera para que intervengan en este caso".
Ante la pregunta de si habría sido mejor para su padre renunciar antes de pasar por una humillación como esta, Correa Bluas dijo que no, y agregó que no lo consideraba una humillación. "Yo personalmente creo en el estado de derecho, y por eso apelaremos a la justicia".
Por primera vez
Este es el primer caso de un magistrado del máximo tribunal que es expulsado por sus pares. Hasta ahora sólo se habían tomado medidas de remoción en contra de ministros de la Corte de Apelaciones.
El 6 de abril último, el Pleno había decidido abrir el cuaderno de remoción en contra de Correo Bulo y al mismo tiempo había rechazado los argumentos del ministro, quien solicitaba que se dejara sin efecto la sanción disciplinaria impuesta el 23 de marzo, que lo suspendía por cuatro meses de sus funciones.
El lunes recién pasado el ministro hizo llegar el documento de respuesta a los cargos de tráfico de influencias que pesan en su contra, sin embargo, el Pleno no dio lugar a estos argumentos y decidió en definitiva su remoción.
Las sanciones en contra del ministro Correa Bulo se debieron por cuatro hechos ocurridas entre 1992 y el año 2000, que fueron calificadas por el Pleno como "atentados contra la responsabilidad del Poder Judicial y la dignidad del cargo de ministro del más alto Tribunal".
Ayer en la tarde el ministro Correa Bulo reiteró que el proceso que se ha llevado en su contra contiene serias irregularidades y "con flagrante violación a la Constitución y las leyes".
Agregó que la Comisión de Etica "habiendo concluido su investigación, ha citado nuevamente a los testigos que comparecieron ante ella".
El ahora ex ministro de la Corte Suprema agregó que "si este hecho no se aclara, como lo he solicitado insistentemente, se podrá pensar que se han adulterado instrumentos procesales, con las consiguientes responsabilidades criminales que de dicho ilícito deriven".
Cargos contra el ministro
La resolución dictada el 23 de marzo por el pleno de la Corte Suprema, en que se sancionó con cuatro meses de suspensión a Correa Bulo, aludió expresamente al caso del ex subprefecto de Investigaciones Sergio Oviedo, requerido por narcotráfico por Estados Unidos en 1992.
En esa fecha, la vista de la causa debió ser anulada cuando, en un fin de semana en que todavía no se escuchaban en la sala todos los alegatos, Correa Bulo y el defensor de Oviedo, Germán Arias, fueron vistos en un hotel de La Serena.
Otro caso que consideró el organismo para justificar esa acusación que se da por probada es el del abogado Carlos Cruz-Coke.
El profesional asumió el año pasado la representación del magistrado ante la Cámara de Diputados, en circunstancias que había alegado días antes en la Sala Penal en favor de las empresas Cardoen, en una causa entablada por las familias de los trabajadores que murieron en una explosión ocurrida en Iquique en 1986.
En ambos casos (Oviedo y Cardoen), Correa debió inhabilitarse luego que una de las partes le representó el hecho.
Respecto de las otras dos situaciones investigadas, el pleno sostuvo que "las intervenciones del ministro señor Correa Bulo en los procesos relativos a Eugenio Novoa Chévesich y a Gilda Correa Bulo pudieron incidir significativamente en el curso de ambos procedimientos y, en todo caso, constituyeron graves acciones reñidas con la ética de un juez, en la medida que se practicaron ante los tribunales de inferior jerarquía que conocían tales asuntos".