ZARAGOZA.- El juez de la Corte de Apelaciones Juan Guzmán, que procesó a Augusto Pinochet por 75 crímenes de la ''Caravana de la muerte'', dijo que ''sin España o Gran Bretaña, el proceso habría ido viento en popa''.
''El general tuvo querellas desde enero de 1998 y fue detenido seis meses después'', explicó Guzmán al señalar que ''la investigación se hizo desde un comienzo con bastante seguridad y profesionalismo''.
Indicó que ''conforme a la ley española, el juez Baltasar Garzón tenía competencias y, conforme a la ley chilena, la justicia chilena tenía competencias'', pero subrayó que ''ahora, se trata de hacer justicia, en lugar de pelearse por las competencias''.
Guzmán manifestó que el proceso -con una etapa de investigación, acusatoria y posiblemente un juicio- no es ''una cruzada contra Pinochet'' y recalcó que no tiene nada contra el general porque ello lo inhabilitaría como juez y como persona.
Reconoció que recibió ''presiones para navegar en un sentido o en el otro, de todos los lados, pero esas presiones terminaron'', por lo que no va a pronunciarse más acerca de ellas.
El proceso, explicó, supuso un cambio ''no muy favorable'' en su vida -''en el sentido de que antes era un hombre normal y corriente''- mientras que, en la actualidad, va ''huyendo'' de la prensa, tiene que tener protección policial y tiene que cuidarse de todo lo que diga, porque puede ser ''mal interpretado, mal usado y tergiversado''.
''En Chile se está tratando de llegar a buen puerto en esta causa, pero son miles los factores que hacen que sea muy difícil'', aseguró el juez, quien agregó que ''la mayoría de las instituciones chilenas son excepcionalmente profesionales y honestas''.
Precisó que hay abogados que presentan más libelos de los que deberían y llevan al proceso muchos episodios que corresponden a otros jueces, por lo que ''hacen perder el tiempo y el prestigio del proceso, que es tan importante para la sociedad chilena''.
Además, añadió, los abogados de la defensa están tratando de utilizar cualquier error por su parte para acusarle de parcialidad.
Respecto al proceso, consideró que ''al grado que se ha llegado en Chile, no se ha llegado en ninguna parte'', algo de lo que se mostró muy orgulloso, y agregó que ''los chilenos, que provenimos de dos razas muy orgullosas, cuando tenemos entre manos algo importante, luchamos hasta el final y siempre ganamos''.
Dentro del Congreso Iberoamericano de Derecho Penal, Guzmán pronunciará el viernes una conferencia sobre ''Aspectos sustantivos y procesales de la persecución penal y nacional e internacional de altos cargos y funcionarios por los denominados crímenes de guerra''.
Guzmán hizo estas declaraciones en Zaragoza, donde participa en en el III Congreso Iberoamericano de Estudiantes de Derecho Penal, que reúne a más de 33 ponentes procedentes de España y Sudamérica.
