SANTIAGO.- Cuando todo hacía suponer que este fin de semana quedaría zanjado el acuerdo parlamentario al interior de la Alianza por Chile, este viernes las relaciones entre Renovación Nacional y la Unión Demócrata Independiente volvieron a tensionarse, provocando de esta manera un nuevo estancamiento en la negociaciones por la plantilla parlamentaria en la oposición.
El nuevo titular de Renovación Nacional, el empresario Sebastián Piñera, llamó a su par de la UDI, el diputado Pablo Longueira, a deponer las actitudes "soberbias y prepotentes" al responder las declaraciones que éste hiciera en cuanto a que Renovación Nacional no respeta la palabra empeñada al no querer firmar el acuerdo parlamentario, que desde inicios de esta semana se viene trabajando al interior de la Alianza.
Esta mañana, y en un tono que demostraba molestia hacia la directiva de Renovación Nacional, el presidente de la Unión Demócrata Independiente, Pablo Longueira, traspasó toda la responsabilidad en la demora para alcanzar un acuerdo parlamentario en la Alianza por Chile a sus "socios" de la calle Antonio Varas.
Acompañado por el senador Carlos Bombal y el diputado Julio Dittborn, el timonel de la UDI fustigó a la nueva directiva de Renovación Nacional para que esta colectividad suscriba, de una vez por todas, el acuerdo parlamentario que desde principios de esta semana habían afinado ambos partidos en reuniones sostenidas desde el lunes.
"Digamos las cosas por su nombre, acá no se quiere cumplir con la palabra empeñada", sostuvo el presidente de la UDI en alusión a que la directiva de Renovación Nacional no quiere estampar la firma definitiva que cierre el pacto que -según palabras de Longueira- "ellos mismos nos propusieron y que nosotros estamos dispuestos a sellar desde el miércoles".
Según confesó el propio Longueira, el acuerdo que planteó Renovación Nacional, el mismo que se discutió con Cardemil a la cabeza, estipula que la competencia de senadores se definirá con la fórmula 4-3-2, lo que implica que Renovación Nacional propondrá cuatro candidatos privilegiados; la UDI los hará con otros tres y se dejará dos circunscripciones abiertas a la competencia total.
Sin bien Piñera confirmó la existencia del acuerdo en la fórmula, dijo que "lo que pretende el señor Longueira además que elegir los candidatos de la UDI, es determinar también los de Renovación Nacional", al referirse a un documento que el jueves llegó a la colectividad -enviado por Longueira- en el que se estipulaba con nombres y apellidos cuáles serían los candidatos de Renovación Nacional en las circunscripciones en que este partido tendría preferencia (Julio Lagos en la I Región, Baldo Prokurica en la III, Sergio Romero en la Quinta cordillera y Antonio Horvath por la XI).
El justamente este asunto el que ahora tiene molesto a Renovación Nacional, pues -dijo el presidente de RN- en la UDI se dio como acordado el documento que el jueves llegara por fax a la oficina del propio Piñera con la fórmula en que los candidatos de Renovación Nacional serían Lagos, Prokurica, Romero y Horvath, sin considerar las opciones de los diputados Alberto Cardemil y Alberto Espina. "Los acuerdos se logran entre dos partes", enfatizó Piñera en abierta alusión al documento que Longueira hiciera llegar a sus oficinas y que se tomó como base para decir que estaba todo sellado entre las partes.
El tema pasa ahora en el cambio de plantilla de candidatos que deberá hacer Renovación Nacional para reacomodar las opciones de Cardemil y Espina. "Nosotros tenemos todo el derecho de postular a quienes consideremos nuestras mejores opciones en las circunscripciones que nos pertenecen en virtud del acuerdo", dijo Piñera e insistió en que su colectividad no vetará la opción de nadie, "e incluso ni la del propio Longueira".
El resto del acuerdo
Después de esta jornada, parece que en lo único que hay acuerdo entre ambos partidos es en la franja electoral televisiva y en la competencia abierta en los candidatos a diputado.
Al respecto, tanto Renovación Nacional como la UDI acordaron que la franja televisiva correría por parte de cada partido, aun cuando no se descartaba que hubiera segmentos presentados en forma unitaria.
A nivel de diputados, en tanto, la competencia sería total, sin perjuicio de que se pudiera establecer de común acuerdo entre ambas colectividades la omisión de candidatos en algunos distritos.
El papel que desempeñará Joaquín Lavín en la campaña parlamentaria abrió otro punto de conflicto, justo cuando éste ya se creía superado. A este respecto, Sebastián Piñera fustigó nuevamente al edil de Santiago para que éste adopte una posición imparcial hacia todos los candidatos que representen a la Alianza.