SANTIAGO.- El diputado del Partido Por la Democracia (PPD) Aníbal Pérez, junto a dirigentes temporeros, se reunió hoy con el ministro del Trabajo, Ricardo Solari, para pedirle una mayor fiscalización a las empresas que utilizan mano de obra en la temporada agrícola.
Tras la reunión, el ministro Solari informó que cuatro serían los puntos centrales a fiscalizar durante la temporada que comenzó en el mes de octubre y que se extenderá hasta el mes de mayo próximo, cuya dotación aumentará a partir de diciembre, como lo establece la Reforma Laboral.
Indicó que el primero de estos puntos se refiere a la existencia de salas cunas en cada packing agrícola por cada 20 mujeres trabajando. De lo contrario, se pide entregar un bono para llevar a los hijos a la guardería infantil.
Además, se plantea abordar y fiscalizar la forma de aplicación de los plaguicidas, ya que su uso indiscriminado provoca graves daños a la salud de los temporeros.
"Se usan los líquidos sin protección, sin mascarilla, sin trajes especiales. Se fumiga sin mayor protección, lo que ha significado gravísimos problemas a la salud, tanto de los trabajadores, y en especial, a las mujeres que tienen hijos con malformaciones congénitas al estar expuestos a estos fluidos", afirmó Pérez.
Además, el Ministerio se comprometió a tratar el tema del transporte de los trabajadores, vehículos que deben contar con implementos necesarios para trasladar a zonas generalmente rurales a más de 30 temporeros en cada viaje.
Finalmente, se fiscalizará el trabajo infantil, debido a que en la temporada agrícola aumenta la cantidad de niños -menores de 15 años- que trabajan en las faenas, "lo que es ilegal", subrayó Pérez.
Según explicó el legislador, la fiscalización en estas materias está contemplada en la Ley Laboral y Sanitaria, pero en la práctica, "lamentablemente las direcciones del trabajo no tienen los recursos humanos y materiales para llevar a cabo una fiscalización adecuada".
El diputado Pérez, quien es miembro de la Comisión de Trabajo, acotó que cerca del 55 por ciento de los trabajadores temporeros son mujeres, por lo que se hace necesario que los puntos comprometidos por la cartera a fiscalizar, sean rigurosamente analizados.
Por su parte, la dirigenta de la federación de la Sexta Región, Nueva Esperanza, Ana Olmedo, señaló que desde 1995 a 1999 el porcentaje de intoxicados por la exposición de plaguicidas en la región, fue del orden del 38 por ciento.
Por ello, indicó la dirigenta, se hace necesario realizar el examen de colesteraza, que mide el grado de toxicidad que ha inhalado el trabajador en el predio o en los packing, a todos los trabajadores.
Agregó que tampoco existe una regularización clara por el efecto de la utilización del cloro, "tomando en cuenta que la mayoría de las aplicaciones en los huertos se utilizan órganos clorados, que sin regularización puede producir cáncer, a largo plazo".
En tanto, el secretario de Estado, anunció la creación del Programa Nacional de Fiscalización a los Trabajos de Temporada y el fortalecimiento de capacitación a los dirigentes sindicales del área, con el objeto de informar sobre las nuevas normativas vigentes laborales y evaluar la realización de las actividades, para los cerca de 420.000 trabajadores temporeros del país.
Las principales organizaciones de empleadores agrícolas, como Fedefruta y la Asociación Nacional de Agricultura han manifestado su voluntad de colaborar para mejorar la calidad laboral del sector, aseguró el ministro Solari.
