EMOLTV

Chile condenó sentencia a muerte por lapidación dictada contra nigeriana

La Cámara Alta aprobó por unanimidad el proyecto de acuerdo de la senadora Carmen Frei (DC), que se traduce en un reclamo formal al Presidente de Nigeria, Olusegun Obasanjo, por la práctica de este tipo de castigos.

20 de Marzo de 2002 | 21:04 | Agencias/EMOL
Safiya Husaini debe esperar hasta la próxima semana el veredicto sobre la condena dictada en su contra, luego de que fuera acusada del delito de adulterio. VALPARAISO.- El Senado se sumó hoy a la condena mundial a la sentencia a muerte por lapidación dictada contra la nigeriana Safiya Husaini, acusada del delito de adulterio.

En este sentido, la Cámara Alta aprobó por unanimidad el proyecto de acuerdo de la senadora Carmen Frei (DC), que se traduce en un reclamo formal al Presidente de Nigeria, Olusegun Obasanjo, por la práctica de este tipo de castigos.

El texto afirma que "no se puede permanecer en silencio frente a esta barbarie, más aún cuando se comete en contra de una mujer analfabeta, divorciada y madre de tres hijos, a la que aún no se le han probado fehacientemente los cargos que pesan en su contra".

A la vez, critica el devenir de la institucionalidad democrática nigeriana, manifestando que "a pesar de haber terminado la dictadura militar en el año 1990, la severísima Ley de Sharia se está aplicando en doce estados del norte".

El proyecto de acuerdo sostiene que el Senado chileno se opone "incondicionalmente a la utilización de la flagelación, la amputación de miembros y la lapidación como formas de castigo, ya que son penas crueles, inhumanas y degradantes".

El lunes pasado, un tribunal islámico en el norte de Nigeria aplazó hasta la próxima semana su veredicto sobre la condena dictada contra Husaini, una aldeana pobre de 35 años, cuyo rostro arrugado y manos callosas la hacen parecer de mayor edad.

Husaini, acusó a un vecino de la localidad de haberla violado y ser el padre de Adama, nacida en febrero del año pasado. No obstante, el tribunal que juzgó el caso estableció que no había encontrado pruebas suficientes que confirmaran la violación.

En octubre pasado, la mujer fue hallada culpable de mantener "relaciones adúlteras" con un hombre casado, situación punible según las leyes islámicas (Sharia) que rigen en todo el norte nigeriano.

Pese a que el hombre confesó su delito a tres policías, los testimonios de éstos no fueron aceptados por el tribunal de primera instancia que juzgó a Husaini ya que en estos casos la Sharia exige cuatro testigos.

La víctima terminó siendo la acusada después de que, bajo presión de sus familiares, solicitase a la corte que obligara a su atacante a pagar los gastos de mantención de la niña nacida de esas relaciones forzadas.

El tribunal que condenó a muerte a Husaini por adulterio no enjuició, sin embargo, por el mismo delito al hombre participante en esas relaciones ilícitas, quien se retractó luego de su confesión.

La pena capital que prescribe la ley islámica para los adúlteros se ejecuta enterrando hasta el cuello (o las axilas en el caso de las mujeres) al sentenciado, que luego es apedreado hasta morir.

En enero pasado, Husaini retiró la versión de que había sido violada y dijo que el padre de su hija es en realidad su último marido, Yusuf Ibrahim, del que se divorció hace dos años, y con quien mantuvo relaciones sexuales consensuales.

Según la interpretación de la Sharia en el estado de Sokoto, donde se ventila el asunto, en ese caso Husaini no sería culpable de adulterio ya que esa ley permite a ex esposos mantener relaciones sexuales -y los eventuales hijos son considerados legítimos- hasta siete años después del divorcio.
cargando