VIÑA DEL MAR.- No había manera que el máximo exponente del reggaetón entrara por la puerta principal del Hotel. Hubiera sido un caos incontrolable. Daddy Yankee es, sin lugar a dudas, el artista invitado al Festival de Viña que despierta la mayor atención mediática.
El músico puertoriqueño está a la altura de de grandes figuras del rap norteamericano, como Snoop Dog y Sean "Puffy" Combs y que ya lleva más de 3 millones de discos vendidos en el mundo. Apareció en su primer día en Viña decorado como un árbol de navidad con varios collares, pulseras y anillos dorados y con brillantes. No dejaba de hacer poses frente a la avalancha de flashes que lo recibieron y antes de comenzar a responde preguntas dijo "estar feliz de estar acá y que apoya mucho al pueblo chileno".
El rey del reggaetón cuyo verdadero nombre es Raymond Ayala, atribuyó su popularidad a que "entiendo que la música es un lenguaje universal. Por otra parte vengo del pueblo y de la clase obrera". Y agregó frases célebres como "las cosas que se hacen de corazón de hacen de corazón" y "no busco la fama".
Está en el peak de su carrera. Ya se lo escucha en Europa y Japón, está grabando una película llamada "Talento de barrio", y cuenta con una marca deportiva que le hace zapatillas con incrustaciones de oro diseñadas especialmente para él.
Aclaró que el reggaetón, movimiento que fusiona el reggae y el hip-hop con ritmos latinos como la salsa, no es nada nuevo o que haya explotado en este momento. "Para muchas personas es una tendencia nueva, pero para nosotros en Costa Rica es totalmente conocido, un baile popular de hace más de 15 años. El
latin hip hop ya es una cultura."
El boricua de treinta años explicó que el hecho de que este nuevo estilo musical, especialmente el suyo, haya pegado tan fuerte es porque "el ritmo del reggaeton te obliga a bailar quieras lo o no. A grandes y chicos de una año. Por otra parte creo que mi interpretación y el contenido de mis canciones hacen que muchos se identifiquen con mi música".
Frente a las críticas sobre sus letras explicó que "son jergas regionalistas que pueden malinterpretarse en otros lados. Por ejemplo, 'azótala' no signifique que le pegues a una mujer sino que la saques a bailar con todo a la pista de baile."
Contó que va armando sus canciones y letras con lo que va viendo en las discotecas. "Veo como baila la gente, lo que pasa entre la juventud y por eso tantos se siente identificados con mi música".
Anticipó que el show de mañana "contará con todo los hits y habrá sorpresas durante su abertura con un baile reggaetón que traerá el fuego del caribe". Así, pegajosas canciones como "Gasolina", "Lo que pasó, pasó" y "Rompe" reunidos en su disco "Barrio fino" harán mover a toda la Quinta.
Dady Yankee que se presentará el domingo junto a Alejandro Fernández y Amaral, se dio el tiempo de improvisar durante la conferencia un reggetón, de bailar con una asistente y dejar que un pequeño fanático suyo lo saludara. Toda una estrella.