BUHLERTAL.- El seleccionador de Inglaterra, el sueco Sven-Goran Eriksson, es "optimista" ante la posibilidad de que el delantero del Manchester United, Wayne Rooney, pueda participar unos minutos en el partido que Inglaterra jugará el próximo jueves ante Trinidad Tobago en Nuremberg.
"Siempre soy optimista, soy optimista de naturaleza, pero las decisiones las tomo día a día, no pienso más allá", explicó Eriksson en conferencia de prensa.
Rooney, que tuvo que volver a Inglaterra para someterse a una revisión en el pie antes de que los médicos certificaran que está en condiciones para jugar el Mundial, se entrena con el equipo desde el pasado jueves, pero no jugó ni un minuto en el triunfo de los ingleses ante Paraguay.
Si Eriksson decide alinear a Rooney sabe que tendrá un conflicto con el entrenador y "mánager" del Manchester United, Alex Ferguson, quien desea que el técnico sueco reserve a su delantero para la fase de eliminatorias y no arriesgue.
En todo caso, Eriksson no parece dispuesto a dejarse aconsejar. "Rooney jugará cuando esté en condiciones", ha dicho el sueco, quien ha prometido que antes de alinear al delantero del Manchester consultará con un experto independiente para determinar exactamente el estado físico del jugador.
Pero no sólo Eriksson se enfrenta por Rooney con Ferguson, sino también con la afición inglesa, que pide a gritos la alineación del delantero del Manchester United, especialmente después de que el equipo no diera una buena imagen ante Paraguay.
"Nadie influirá en mi decisión. Dispongo de técnicos ayudantes, de un preparador físico y de fisioterapeutas y al final la decisión la tomaremos conjuntamente", insistió el seleccionador inglés.
A pesar de que desde algunos sectores se criticó el juego desplegado por los ingleses ante Paraguay, Eriksson admite no sentirse preocupado y espera que en los próximos encuentros su equipo encuentre el ritmo de juego deseado.
"Se trataba del primer partido. Todo el mundo pensaba que era fácil, pero no fue así. Lo importante es que al final ganamos. Paraguay tiene un equipo de una calidad similar a la de Ecuador, son los terceros o cuartos de Sudamérica y no puedes pretender dominar todo el partido a un gran equipo como ellos,” admitió.
Eriksson comentó que su equipo estuvo bien durante la primera mitad ante los guaraníes. "Pudimos marcar un segundo gol, tuvimos ocasiones para ello y si lo hubiéramos logrado, la segunda parte hubiera sido diferente", opinó.
En todo caso, el sueco apeló al resultadismo. “Tenemos tres puntos y estoy feliz. Tenemos un buen equipo y jugaremos un fútbol mejor del que hicimos".