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DORTMUND.- Sólo le queda una misión a Togo, humillado por el asunto de las primas y eliminado del Mundial 2006 (Grupo G) tras una derrota contra Suiza (0-2): batir a Francia el viernes para que también caiga en la primera fase.
Los Gavilanes se harán sin duda perdonar por sus compatriotas si regresan a Lomé con ese trofeo cargado de símbolos en su primera participación. ¿Pero disponen de los medios para ello?
"Si Francia quiere clasificar nos tendrá que ganar. Tenemos ganas de lograr puntos en este Mundial", explicó tras la derrota contra Suiza el delantero de Brest (Segunda División francesa), Robert Malm.
En las condiciones en las que han tenido que jugar, tras haber "gastado su energía en negociar", según las palabras de su capitán, Jean-Paul Abalo el domingo, es difícil juzgar el nivel real de los africanos.
Como muchos equipos sin gran experiencia internacional, Togo se vio penalizado por toda una mezcla de errores de juventud, como la tarjeta amarilla de Abalo contra Corea del Sur, y falta de suerte, como en la acción dudosa en la que Emmanuel Adebayor fue desequilibrado por el suizo Patrick Muller en el área, sin obtener penal.
La defensa togolesa no ofreció garantías de solidez. Como muchos equipos pequeños en este torneo (Trinidad y Tobago, Angola), los Gavilanes dejaron espacios a Suiza, que supo explotarlos sin estar en un gran día. Aunque la suspensión de Abalo también ayudó a ello.
Adelante, se pudieron ver las virtudes por las que Togo se clasificó para este Mundial. El pequeño Mohamed Kader (1,74) y el gigante Adebayor (1,90) forman un dúo que superó a los sólidos defensas helvéticos, pero sólo les faltó marcar en alguna de las claras oportunidades de que dispusieron.
El seleccionador Otto Pfister prometió algunos cambios en su equipo contra Francia. Entre el primero y el segundo partido, ya hubo cuatro modificaciones.
"Tengo cuatro o cinco jugadores que todvía no he alineado y a los que voy a intentar dar un poco de tiempo de juego para que ganen experiencia", explicó el técnico.
De todas maneras, mucho tendrá que mejorar Togo si quiere impedir que Francia se clasifique para los octavos de final, ya que hasta ahora no ha dado nada de miedo.
Los galos sólo necesitan dos tantos de diferencia y tendrán la suerte de medirse a un equipo que ha estado sumido en la crisis desde el principio del torneo, debido a la revuelta de los jugadores por las primas impagadas.
