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HAMBURGO.- Mientras los brasileños se relajan y ven en su partido de esta tarde ante Japón (15:00 horas) como un ensayo de lo que será su participación en octavos de final, para Italia el cariz de su encuentro ante la República Checa (10:00 horas) es bastante distinto.
Al contrario del escenario que presenta el pentacampeón del mundo, los italianos aún no tienen asegurada su participación en la siguiente ronda, por lo que ante los checos deberán jugarse todas sus cartas para no pasar dolores de cabeza.
Los italianos llegan con una leve ventaja con respecto a los otros integrantes del grupo, uno de los pocos que llega a la última jornada con los cuatro equipos con posibilidades de clasificar. El equipo de Marcello Lippi tiene cuatro unidades, una más que la República Checa y Ghana.
El equipo africano, que junto a Túnez es la única posibilidad que le queda a su continente para tener representatividad en octavos de final, jugará también a las 10:00 horas frente a Estados Unidos, en un partido donde puede definir su propia suerte: un triunfo por cualquier marcador ante los norteamericanos los dejará en la siguiente ronda, sin importar lo que suceda entre italianos y checos.
Para Estados Unidos las chances son más remotas, pero están ahí. Una victoria ante Ghana y una "ayuda" de los italianos en Hamburgo, les puede dar los pasajes a la siguiente ronda.
La definición en el Grupo F no es menos emocionante, pese a que uno de los boletos ya está reservado para Brasil, que enfrenta a un Japón que, con sólo un punto, cruza los dedos en esta última jornada.
Si se da la "lógica" victoria de los brasileños, entonces el otro pasaje a octavos de final estará en juego en el duelo entre Croacia y Australia, donde los oceánicos llegan con la ventaja de que el empate les sirve para clasificar.
El equipo de Guus Hiddink, que ha sido una de las más gratas sorpresas de la Coap del Mundo, intentará volver a aplicar su ordenado fútbol ante la selección de Croacia, que viene de obtener un pálido empate 0-0 ante Japón.
Los Grupos E y F serán rivales cruzados en octavos de final, es decir, si Brasil asegura el primer puesto enfrentará al segundo clasificado del E y vice versa.