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BUENOS AIRES.- La lotería de los penales y algunos fallos del árbitro eslovaco Lubos Michel dejaron a Argentina fuera del Mundial, según coincidieron la mayoría de los hinchas argentinos, que pese a la amargura por una nueva frustración elogiaron el desempeño del equipo.
La presencia de jugadores talentosos como Carlos Tevez y Lionel Messi, más lo que había mostrado el equipo en la ronda clasificatoria, había ilusionado a los hinchas, convencidos de que esta vez podían cortar la racha de 20 años sin levantar la copa. Pero Alemania los despertó del sueño desde los doce pasos.
"Los muchachos pusieron todo en la cancha y perdieron con mucha dignidad", dijo el presidente Néstor Kirchner a la agencia estatal
Télam.
"Hablo como argentino y como presidente: estoy orgulloso por la actuación del seleccionado, por su categoría, por su entrega", agregó el mandatario, que vio el partido en su despacho de la Casa de Gobierno.
"Nos faltó suerte y nos tocó un árbitro que cobraba todo para ellos. A los jugadores no hay nada que reprocharles", dijo Rubén Portillo, de 20 años, vestido con la camiseta número 19 de Messi, que no jugó ante los alemanes, resumiendo el sentimiento de los hinchas argentinos.
La euforia que se vivía en la calle horas antes del partido, dejó su lugar a los rostros de tristeza y bronca. En silencio, con el andar cansino, muchos hinchas caminaban con las banderas enrolladas de regreso a sus trabajos, que habían abandonado para seguir a su seleccionado por televisión en bares o vitrinas, ya que el partido se jugó en horario laboral.
Arturo Silva, un obrero de la construcción, se quejaba de que "hayan puesto un árbitro europeo", sentado en la mesa de un bar del centro ya deshabitado, mientras observaba en pantalla gigante el festejo alemán.
Desde que se conoció la designación de Michel, los medios de prensa local y los simpatizantes reaccionaron con preocupación. Aunque el eslovaco no incidió en el resultado, cada uno de sus fallos fue motivo de aireadas protestas de los albicelestes.
"Siento una gran tristeza. Pero me quedo conforme con la actitud del equipo. Siempre fue al frente", agregó Silva, antes de retornar a su oficio.
Pese a la derrota, unos 200 hinchas se concentraron en el Obelisco, cita obligada de festejos en partidos anteriores, para gritar por "Argentina", como Fernando Durán, vendedor de seguros, con una bandera sobre sus hombros. "Es una manera de sacar la bronca. Perdimos con dignidad", resaltó.
En un avance de lo que serán las portadas de los principales diarios del sábado,
Clarín tituló en su sitio de internet que "Argentina fue más, pero se quedó fuera por penales".
"Afuera en la lotería de los penales", puso en su edición digital el diario deportivo
Olé. "El árbitro eslovaco los favoreció y cobró todo para ellos", disparó.
Argentina, campeón en 1978 y 1986, no se pudo tomar revancha de la final que perdió ante Alemania en 1990. Esa fue su última mejor marca, ya que en mundiales posteriores no superó los cuartos de final.
Además, suma 16 años sin victorias durante los 90 minutos de tiempo regular en partidos de instancias decisivas. La última vez fue justamente en Italia, cuando dejó en el camino a Brasil, también en octavos.
Desde entonces, se valió de los penales para acceder a otra ronda. "Los muchachos jugaron muy bien. Pero los penales son a suerte y verdad y encima el árbitro pitó para ellos", reflexionó María Emilia Pascal, mientras levantaba su puesto callejero de venta de banderas, gorros y camisetas.