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PARÍS.- Los franceses se han echado a las calles para celebrar, esta noche, la victoria de su selección contra Portugal (1-0) que les da el pase a la final del Campeonato del Mundo de Fútbol.
Apenas unos minutos después de terminado el encuentro miles de personas salieron a la calle a festejar el éxito del combinado francés con enarbolar de banderas, petardos, gritos y golpes de bocina.
Las cadenas de televisión francesas han mostrado ya aglomeraciones en plazas de distintas ciudades del país donde los aficionados dan rienda suelta a su alegría, en una reedición del Mundial de 1998, que Francia albergó y ganó.
En París muchos aficionados se congregaron en recintos deportivos donde se habilitaron pantallas gigantes, como en el Estadio Parque de los Príncipes, aunque hubo quien optó por verlo en bares.
Cuando el árbitro pitó el final del partido un grito unánime y liberador resonó en la ciudad, cuya principal arteria, los Campos Elíseos, se había llenado de gente menos de media hora después de la contienda.
El sábado pasado, cuando Francia eliminó a Brasil en cuartos de final, medio millón de personas celebraron el triunfo en París, la mayoría en los Campos Elíseos, que está noche están cerrados al tráfico rodado, para permitir el acceso de los ciudadanos.
Las autoridades han dispuesto el despliegue de unos 2.000 policías en París para prevenir posibles incidentes callejeros tras el partido, después de que el sábado pasado se registraran enfrentamientos entre grupos de jóvenes y la Policía, que tuvo que emplear gases lacrimógenos, con el resultado de varios heridos de escasa consideración y 69 detenciones, debido a que los radicales atacaron comercios y vehículos.
"Allez les bleus", el grito de ánimo de la afición, es el lema que está en todas las bocas, mientras abundan las camisetas de la selección, con mayoría de los que la llevan de Zinedine Zidane, autor del gol esta noche y gran ídolo de los franceses.