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PARÍS.- "Pido perdón, pero no me arrepiento", aseguró hoy el ex astro francés Zinedine Zidane, al hablar por primera vez del cabezazo que le aplicó al italiano Marco Materazzi y que derivó en su expulsión en la final del Mundial de Alemania.
"Él me insultó con palabras muy duras", explicó "Zizou" en declaraciones a Canal Plus, uno de sus patrocinadores y ante el que por primera vez se refirió a la agresión contra Materazzi.
El volante francés evitó explicar de modo concreto qué le había dicho Materazzi para hacerle reaccionar de ese modo, pero confirmó que las palabras del defensa italiano iban dirigidas contra la hermana y la madre de Zidane, quien afirmó que eran comentarios "muy personales" y añadió que "es necesario sancionar al culpable".
"Él me tiraba de la camiseta y yo le dije que parara y que si la quería que esperara al final del partido. Entonces me dijo palabras muy duras que repitió varias veces, palabras que me afectaron mucho sobre mi hermana y mi madre", afirmó Zidane, quien añadió que prefería recibir un puñetazo en la cara que escuchar ciertos insultos.
El francés pidió perdón por el gesto y dijo que lo lamentaba especialmente por los niños, "que tienen que evitar ese tipo de cosas", pero dejó claro que no hay arrepentimiento. "No me arrepiento. Si lo hiciera él (Materazzi) tendría razón para decir lo que dijo, y no es así", manifestó.
Zidane jugaba, además de la final del Mundial, el último partido oficial de su carrera, por lo que el incidente opacó el que podría haber sido un gran final para el ex capitán francés.
El hecho, además, podría costarle el premio al Mejor Jugador del Mundial de Alemania, según anunció hoy la FIFA, que ya inició una investigación para determinar qué sucedió entre ambos jugadores.