Enredos del corazón

En el serializado cine norteamericano surge este muy buen drama dirigido por un desconocido, pero talentoso autor: el guionista y director Mike Binder, rostro de la serie "La mente de un hombre casado".

Se trata de una mirada a una familia que sufre los estragos de la ausencia paterna. Terry (una genial Joan Allen, "Nixon") es una dueña de casa de suburbio cruzada por la rabia que le produjo la partida de su marido, de quien no sabe nada.

Terry cría a cuatro hijas y en ese concierto femenino, casero y caótico entra el vecino Denny Davies (Kevin Costner), un ex jugador de béisbol panzón y de risa fácil que resulta el apoyo y bálsamo ideal para ablandar la bronca y el mal rato.

"Enredos del corazón" es una pieza coral de ensamble complejo que fluye gracias a un guión preciso y emotivo y a la carne que les brindan los actores a personajes con heridas emocionales a cuestas, frágiles y erráticos que, a la postre, se convierten en seres queribles y llenos de humanidad.

Costner (en un regreso soberbio) y Allen son los dos soportes de este gran estudio sobre el carácter femenino. He aquí una buena pieza de artesanía que alcanza ribetes de gran arte.