Exposición del taller de arte de la Fundación Complementa

Han sido varios los momentos en la historia del arte, desde comienzos del s. XX, en que la mirada se ha detenido en la producción artística alterna.

Destaca, en sus comienzos, la labor realizada por George Courteline, quien presentó públicamente por primera vez las obras realizadas por un grupo de artistas sin estudios académicos llamada Gabinete de horrores. En el mismo período, Alfred Jarry rindió un homenaje a un grupo de artesanos de tallado. Durante esos años, el siquiatra Dr. August Marie también exhibió las obras de sus pacientes en el asilo Villejuif. Paralelamente, Gauguin, Apollinaire, André Bretón, entre otros, con sus intervenciones, le dieron un nuevo espacio al arte popular, a lo vernáculo, a lo naive. Paul Klee, a través de sus obras, aportó una nueva valoración a la grafía infantil. El expresionismo de Die Brüke, la influencia del arte africano en Picasso, el arte y lo naive en Henri Rosseau, han permitido establecer vínculos dinámicos que enriquecen el campo de las artes.

En la actualidad existen museos dedicados exclusivamente a exhibir estos trabajos en países como Francia y Bélgica, redes de contactos en Internet y la revista internacional Raw Vision que circula desde 1989 y que periódicamente publica libros especializados.

La exposición y sus artistas

“Para el MAC, acoger esta muestra en su calendario de exposiciones, es de gran significación” -comenta el director del museo, Francisco Brugnoli- y agrega: “A través de ella facilitamos la continuidad presencial de la producción alterna en los circuitos del arte y establecemos la interrogante respecto a los bordes de la definición del arte y de aquello que ha quedado fuera de su encuadre”.

Las obras presentadas en la exposición Otro arte: taller Fundación Complementa, nos brindan la oportunidad de enriquecer la discusión sobre el acceso del conocimiento a través de las facultades visuales: “Es necesario restaurar la valoración de la energía, la memoria histórica y la subjetividad como componentes fundamentales del sentido de representación. Estos medios alternativos de comunicación nos permiten contar ‘otras historias’, aquellas producidas más allá de las secuencias oficiales o ideológicas realizadas por diferentes grupos de poder. Nos permite recobrar fragmentos de una historia no representada o invisible, permitiendo enriquecer la mirada dinamizándola, proveyendo pluralidad de sentidos”.

El taller de arte de Fundación Complementa, creado en 1992, es coordinado por la directora de esta institución, Carmen Bunster, junto a la artista y profesora del taller, Nieves Mac-Auliffe, quien cumple las funciones de facilitar y motivar la producción de obras empleando distintos medios.

Los grabados fueron realizados bajo la guía del artista español Daniel de Campo, curador de la muestra Los tres grandes de España. Cuando él vino a Chile a montar la exitosa exhibición, buscó una fundación que hubiese trabajado con artistas con síndrome de Down. La encontró en Complementa, invitó a dibujar a los adolescentes y traspasó las obras a las técnicas de grabado.