Un estilo que nace de la búsqueda del contraste entre la naturaleza y la civilización humana, es el que intenta plasmar la artista Mariana Najmanovich en su exposición "Safari". "Ambos conceptos representados por distintos íconos, entre ellos el elefante (naturaleza) y las máquinas (civilización)".
La artista asegura que la muestra se inscribe dentro de esos conceptos y esa búsqueda, con iconos nuevos (como la tortuga) y también nuevas técnicas. "Además de los acrílicos sobre tela, voy a mostrar trabajos más gráficos donde el dibujo estructura todos los aspectos de la obra", anuncia.
Se trata de un viaje simbólico no sólo al África, sino además a la propia historia personal de la artista. Así podemos ver la cúpula de Brunelleschi, componente y símbolo cultural, la tortuga y otras criaturas en peligro, vinculadas a lo ecológico. Alguna referencia de figura humana que puede ser un autorretrato y alguna alusión a la realidad más contingente.