El cantante habla de un nuevo Ricky Martin.
El Mercurio.
VIÑA DEL MAR.- En la postura de un hombre que viene de vuelta, llegó a Viña del Mar el cantante Ricky Martin, encargado de abrir hoy la última noche del Festival.
Con frases como "mi motivación viene de otro lugar", "hoy me prende lo simple" o "estoy buscando la calma", el puertorriqueño mostró a un nuevo Ricky Martin, tratando de dejar en claro que los presentes esta noche en la Quinta Vergara verán a otro artista, distinto del que allí estuvo en las versiones 93 y 96 del certamen.
El cantante, que desde esta última vez hasta ahora se ha transformado en un artista mundial, anunció un show de 80 minutos centrado en album unplugged (por cuyas ventas en Chile recibió un disco de oro), pero no del todo desenchufado. Hoy también habrá espacio para su faceta más bailable, con canciones como "livin la vida loca".
Martin reconoció en su regreso a Viña que "este escenario es adictivo".
El espiritual, el de negocios y el de ahora
En la cita de rigor con la prensa que cubre el festival, Ricky Martin también se dio tiempo para hablar de su vida cuyos últimos años resume en dos etapas: Como un obsesivo del negocio musical, primero y como un también obsesivo hombre espiritual, después. "En un momento mi obsesión era mi carrera. Luego me propuse ser espiritual, y me fui a la India y todo era espiritualidad. Pero hay que buscar un poquito de todo y no obsesionarse con nada. Eso es malo, es de perdedores", sentencia el cantante.
Hoy asegura haber dejado atrás ambas etapas para simplemente vivir el día a día. "En los últimos años he estado bien, tranquilo, en mi casa....hoy lo más importante es el agradecimiento por estar vivo, por tener salud".
Esta nueva actitud la lleva incluso a su carrera, al comentar que no tiene planes futuros claros. "No puedo pedirle más a la vida. Todo lo que viene es la guinda arriba de la crema". Sin embargo, el cantante no quiso entrar en su ámbito más privado. "¿Te casas con Luisa Fernández?", le preguntó un periodista centroamericano, la única interrogante que Richy Martin dejó sin respuesta.