Quintanilla asegura que llegará en óptima forma a la competencia: "Estoy tranquilo, siento que este año estoy cumpliendo una gran preparación. He corrido casi todo el tiempo sin mayores sobresaltos, y entrenando en los desiertos de Calama a Copiapó habitualmente. Y como es natural en estas fechas, ya se comienza a sentir toda la ansiedad, pero eso es parte también de esta aventura maravillosa. Saber que estoy con todas las condiciones, con buen estado físico, me genera una gran ilusión".

"Sé que le puedo ganar a cualquiera. Hice un gran trabajo psicológico, que era mi principal debilidad: me siento más maduro que nunca y, por ello, voy muy motivado a este Dakar", cuenta Ignacio Casale, quien espera repetir el triunfo que consiguió en 2014 en la categoría quads, y que este año no pudo revalidar al abandonar en la décima etapa.

Será la sexta aventura de Boris Garafulic en el Dakar, donde siempre ha cruzado la meta, excepto en 2011, en su estreno. Hoy, a bordo de un Mini y los colores de X-Raid Team, el piloto santiaguino apunta a un logro inédito: "El objetivo es terminar entre los diez primeros".