SANTIAGO.- Ya es una historia repetida. Colo Colo marca muchos goles, pero también le anotan varios en su portería. Sin mejorar los mismos problemas defensivos de las primeras fechas, el cuadro de Borghi ganó 5-3 a Everton de Viña del Mar en el estadio Monumental, en un encuentro que lo que más tuvo fueron goles.
Para contrarrestar los problemas defensivos, el técnico albo colocó en este partido a dos volantes defensivos: Arturo Sanhueza y Moisés Villarroel. Pero ni eso pudo salvar al cuadro popular de los problemas en la última línea, a pesar de que dos de los tres goles fueron de media distancia.
Aparte de este cambio táctico, Borghi introdujo varios cambios, unos obligados por lesiones y expulsiones y otros por decisión técnica, como el caso de Humberto Suazo, quien sólo ingresó en el segundo lapso.
Tal como en el encuentro con La Serena el equipo popular se puso rápidamente arriba en la cuenta. A los 14', Héctor Mancilla puso el 1-0 mediante lanzamiento penal después de una falta a la figura del encuentro, Matías Fernández, quien se vio mucho mejor sin la compañía de Valdivia en media cancha.
A pesar de no demostrar una gran superioridad, Colo Colo quedó 2-0 a los 24', nuevamente por intermedio de Héctor Mancilla, quien se consolida como exclusivo goleador de los albos con 4 goles. Esta segunda anotación del ex hombre de Huachipato llegó después de un carrerón de otro que anduvo bastante bien, Alejandro Vásquez, reemplazante del lesionado Jerez.
Sin hacer mayor esfuerzo el equipo de Borghi quedó rápidamente 3-0 arriba a los 33', tras cabezazo de Miguel Riffo, quien se anticipó a los defensas en un lanzamiento de esquina de Braulio Leal.
Hasta ese momento todo hacía suponer que Colo Colo ganaría fácil al equipo de Espina, pero nuevamente aparecieron los fantasmas defensivos. A los 39' Cristian Uribe puso el descuento para los viñamarinos, tras grueso error de la última línea blanca, que dejó sin marca al volante oro y cielo, quien solo peinó el balón para que se colara en el arco de Bravo.
Así se fueron al descanso, con un conjunto albo que no jugaba bien, pero marcaba en el pórtico rival.
Un segundo de miedo
Volviendo de camarines la tranquilidad llegó a la banca de Borghi tras una genialidad de Matías Fernández. El "Mati" se saca tres rivales de encima con un certero enganche a la entrada del área y pone el balón abajo ante la salida del arquero Carlos San Martín, quien no tuvo una buena reacción al disparo del conductor colocolino.
Pero llegaron los minutos más complicados para los albos. Cristian Uribe a los 59' y luego a los 76', dejó el marcador 4-3, pero con un Colo Colo que comenzaba a confundirse y a pensar en que podía ocurrir lo de la semana pasada en La Serena, cuando ganaba fácil 2-0 y terminó emnpatando el partido en el segundo lapso.
Pero cuando se nublaba el camino para el equipo de Borghi apareció Humberto Suazo a los 81 minutos y puso el tranqulizador 5-3 en favor de los locales.
Para Colo Colo quedan varias conclusiones después de este partido: Matías Fernández se vio mucho mejor sin Valdivia; Alejandro Vásquez puede ser una alternativa más que viable para Borghi; Con dos volantes defensivos defiende mejor, pero no es solución si los de atrás no se concentran; Héctor Mancilla no marca bellos goles, pero está ahí y es el goleador del equipo.
A Everton no le basta con Uribe en el medio y muchos problemas por las bandas, donde Colo Colo los superó cada vez que desbordaron.