SANTIAGO.- Volkswagen aceptó pagar una multa de más de 1.000 millones de euros (unos 1.180 millones de dólares) determinada por la Fiscalía de la ciudad alemana de Brunswick por el escándalo en torno a la manipulación de motores diésel.
"Volkswagen acepta la multa y con ello reconoce su responsabilidad", señaló el gigante del automotor alemán en un comunicado emitido desde su central de Wolfsburgo.
La multa llega casi tres años después de que Volkswagen admitiese haber instalado un sistema en casi 11 millones de vehículos diésel que permitía manipular las pruebas de emisiones de gases contaminantes.
Tras el escándalo, los políticos tanto de Estados Unidos como de Europa sometieron a un mayor escrutinio las emisiones de los vehículos diésel.
El dieselgate ha unido a los consumidores en demandas privadas contra la empresa y hace pocos días se conoció que unos dos millones de propietarios de vehículos diésel en Alemania estudiaban unirse en contra de Volkswagen buscando una compensación.
Por otro lado un tibunal austriaco ordenó a un concesionario reembolsar íntegramente a una clienta el vehículo Volkswagen que había comprado, debido a la presencia del programa informático que trucaba los niveles de emisiones de gases contaminantes.