Unos 5,3 millones de vehículos diésel fueron dotados con un nuevo software para medir y reducir las emisiones tras el escándalo por la manipulación de motores, según informó el Ministerio germano de Transporte.
El ministerio explicó que esta acción logró que las emisiones contaminantes se hayan reducido más de lo que se preveía en principio.
De acuerdo con investigaciones de la Oficina Federal de Vehículos Motorizados (KBA), organismo dependiente del Ministerio germano de Transporte, las emisiones de óxido nítrico (NOx) se redujeron en la práctica en hasta un 60 por ciento luego de las primeras mediciones.
Los fabricantes de coches de Alemania accedieron a actualizar el software de 5,3 millones de automóviles para fines de 2018 como resultado de una reunión con las autoridades en 2017. En concreto, esperaban que las emisiones contaminantes se redujeran en promedio entre un 25 y un 30 por ciento.
Aunque la medida se realizó con un año de retraso, los millones de vehículos ya cuentan con la nueva herramienta que nació a raíz del Diéselgate.