La Fórmula Uno sigue siendo golpeada por la pandemia del coronavirus y durante las últimas horas se confirmó que el Gran Premio de Canadá, programado para el 14 de junio, fue aplazado a raíz de la emergencia sanitaria.
Con esto ya suman nueve carreras canceladas o postergadas durante este 2020, dejando al deporte motor más importante del mundo en una complicada posición de cara al futuro.
No obstante, el CEO del campeonato, Chase Carey, puso un toque de calma señalando que "siempre esperamos viajar a la increíble ciudad de Montreal y, aunque tendremos que esperar un poco más, haremos un gran espectáculo cuando vayamos más adelante este año".
Por otro lado, el CEO y promotor del GP de Canadá, Francois Dumontier, indicó que "en este momento es crucial que todas nuestras energías se unan para superar al Covid-19. Le daremos la bienvenida con los brazos abiertos en el Circuito Gilles-Villeneuve tan pronto como sea seguro hacerlo".
Tras la suspensión de Canadá, por ahora el Gran Premio de Francia, programado para el 28 de junio, asoma como el posible inicio de la Fórmula Uno 2020. Sin embargo, hace unos días se confirmó que el circuito de Shanghai en China volverá a abrir el próximo 26 de junio, sumándose como opción para retomar el deporte tuerca.
El complicado futuro de la Fórmula Uno
Si bien por el momento algunos representantes de la Fórmula Uno siguen esperanzados en retomar la acción cuando pase la ola más crítica del coronavirus, también hay otras voces que levantan las alarmas con respecto al futuro de la competencia.
Es así que Zak Brown, CEO de McLaren, explicó a la BBC hace unos días que motivo de la crisis "podrían desaparecer cuatro equipos si la situación no se maneja correctamente. La Fórmula 1 se encuentra en una situación muy delicada ahora mismo".
Por otro lado, Franz Tost, jefe de uno de los equipos más pequeños de la competencia: Alpha Tauri, propiedad de Red Bull, vaticinó que la situación se volvería "muy crítica" si las carreras se siguen aplazando más allá de julio. "Si comenzamos a competir en julio, saldremos con un ojo morado (…) Cuando no disputamos un gran premio, nos cuesta entre uno y medio y dos millones de dólares", dijo al medio Motorsport Total.
"Si no sucede nada durante todo el año, será un asunto muy crítico. Si no tienes ingresos, obviamente es un desastre económico", complementó.
De ahí que el futuro de la Fórmula Uno siga siendo complejo a medida que avanzan las semanas y sigue creciendo la expansión de la pandemia del coronavirus.
