Desde hace ya un buen tiempo la empresa Honda ha debido enfrentar duras acusaciones e investigaciones debido a problemas con las bolsas de aire Takata y que llevaron al fabricante a hacer un llamado de revisión a más de 2,7 millones de vehículos solo en Estados Unidos y Canadá por generar un riesgo para la seguridad de conductores y ocupantes.
De hecho, según informa la Comisión Australiana de la Competencia y del Consumidor, al menos 29 personas han fallecido y más de 320 han resultado lesionadas en todo el mundo y en distintos modelos y marcas de autos debido a las fallas de los airbags Takata.
Ahora, el caso tuvo un nuevo episodio después de que Honda decidiera pagar más de 81 millones de euros para zanjar, en Estados Unidos, un litigio relacionado con este mismo tema, informó el medio Motorpasión.
“Este acuerdo con Honda deja claro que las empresas, grandes y pequeñas, enfrentarán graves consecuencias cuando coloquen las ganancias por encima de la protección de la seguridad de sus clientes", dijo el fiscal general de Washington, Karl Racine, a CBS.
Destacar que Takata se declaró en quiebra en el año 2017 tras una profunda crisis provocada por sus airbags defectuosos que, en ese momento, ya generaban una ola de acusaciones y denuncias.
Las bolsas de aire de la compañía presentaban distintos problemas según el modelo de vehículo. Desde la no apertura, hasta un despliegue con una fuerza explosiva que podía herir de gravedad a los ocupantes eran algunos de los riesgos que generaban.