El fabricante de vehículos japonés Honda se robó la atención de la industria automotriz al anunciar que comenzará a fabricar en su planta de Estados Unidos un inédito vehículo híbrido que se aleja de las configuraciones motrices hasta ahora conocidas al incorporar una pila de combustible de hidrógeno en reemplazo del motor térmico.
Por definición, un vehículo “híbrido” es aquel que emplea dos sistemas de propulsión y en la industria actual, por lo general, la hibridación se logra combinando un motor de combustión interna con otro propulsor eléctrico alimentado por una batería.
En esa línea, hay distintos tipos de hibridación dependiendo del tamaño de la batería, pasando desde los vehículos híbridos suaves, donde el motor eléctrico sólo ofrece asistencia al motor de combustión que debe operar constantemente; hasta los híbridos enchufables que tienen una celda de energía más grande que les permite operar en el día a día como cero emisiones y recurrir a su motor de combustión sólo para viajes largos.
Bajo ese contexto, el hidrógeno ha quedado hasta ahora fuera de la ecuación de los sistemas híbridos, salvo contados intentos como el Toyota Mirai y el Hyundai Nexo, modelos que se lanzaron con una pila de combustible para alimentar el motor eléctrico, pero que no se pueden conectar a la red por tener baterías muy pequeñas.
Honda ahora fue un paso más allá al presentar su nuevo modelo con pila de combustible, el CR-V e:FCEV, un vehículo que esconde bajo su capó una tecnología que nadie había producido hasta ahora.
Este ejemplar tiene un sistema híbrido que combinará la pila de combustible de hidrógeno con una batería más grande y propia de los sistemas híbridos enchufables.
Según Honda, la autonomía de este vehículo será aproximadamente de 440 kilómetros con hidrógeno más otros 30 km que podrá recorrer aprovechando la energía almacenada en la batería, la que además se puede recargar con la red eléctrica.
El sistema de propulsión a través de una pila de combustible de Honda se realiza de manera conjunta con General Motors, sociedad que ha permitido mejorar la eficiencia y durabilidad del sistema, según dijeron las compañías.
"Producir un vehículo eléctrico de pila de combustible con cero emisiones es un paso más hacia el objetivo global de Honda de lograr la neutralidad de carbono para nuestros productos y operaciones", dijo el responsable del proyecto, Patrick McIntyre.
El motor eléctrico del CR-V e:FCEV ofrece 174 CV de potencia y un par máximo de 310 Nm. Su depósito tiene capacidad para 4,3 kilos de hidrógeno principalmente, y su batería es de 17,7 kWh de capacidad, lo que le aporta una autonomía extra.
