Los descargos de Mayne-Nicholls.
Archivo El Mercurio
SANTIAGO.- El empresario argentino Alejandro Burzaco denunció ayer a varios dirigentes sudamericanos de haber recibido coimas en el marco del caso de corrupción de la Conmebol y la FIFA.
Acusó a varios, pero también aclaró que hubo dos ex presidentes de federaciones que nunca aceptaron sobornos: Harold Mayne-Nicholls de Chile y Sebastián Bauzá de Uruguay.
"Siempre he actuado de una manera. Me equivoqué en mandar ese mail a la academia en Qatar y lo reconocí desde el día 1. Fui castigado y sancionado con muchísimo más que ellos que se llevaron mucho dinero y otras cosas. Lo acepté hasta que logré demostrar que era excesivo el castigo. Es complicado decir yo soy honesto. La gente que me conoce sabe cómo soy", valora el ex timonel de la ANFP en conversación con
Emol.Pero el periodista sí vio de cerca cómo se gestó todo este escándalo, e incluso denuncia que a él intentaron convencerlo de participar.
"Nunca intentaron sobornarme directamente. Sí me ofrecieron formar el famoso contrato que permitió la caída de toda esta gente (en el que se asignaban los derechos de televisación). Me insistieron, me insistieron, me contaron la historia muchas veces. Pero yo me negué, porque sabía que no solo era antiético, sino que inmoral firmar un mismo contrato que ya estaba", recuerda.
Se atreve y da nombres: "Hubo muchos dirigentes. Esto empezó como en agosto del 2010, cuando volvimos del Mundial de Sudáfrica. Recuerdo a Luis Chiriboga (Ecuador), Romer Osuna (Bolivia), eran varios. El último fue Manuel Burga (Perú), quien era un buen amigo, que todavía lo es, pero que lamentablemente aparece involucrado en todo esto. Él fue el último que me lo ofreció, pero me negué tajantemente".
Y si estaba al tanto de todo esto, ¿por qué nunca habló? Se defiende. "¿Por qué habría de denunciarlo? Yo no lo firmé. No soy policía, no tenía idea que había coimas, eso se supo después. Simplemente me negué a actuar, lo hice además con conocimiento pleno de mi directorio, Jorge Contador era secretario general y estaba al tanto, también Ricardo Abumohor que era miembro del Comité Ejecutivo de la Conmebol. En firmar eso no era ilegal, era inmoral y antiético, porque ya se había firmado un contrato y no correspondía. No sabía que había coimas. Eso se verificó cuando llegó Sergio Jadue y lo firmó. No veo por qué yo debía haber salido a denunciar, no era mi labor. Además yo ya salía del fútbol".
Justamente, Mayne-Nicholls profundiza sobre Jadue. "No tenía duda alguna que Jadue lo firmaría. Sabía que lo iban a llevar a ese contrato. Yo ya conocía su forma de actuar y aquí había algo importante para él. Ahora, nunca pensé que además se iba a llevar dinero. Pero cuando supe que Eugenio Figuereido lo había invitado con todos los gastos pagados a él y toda su familia a Punta del Este, poquito después que asumiera en la Conmebol, no me quedó duda que lo iba a firmar. Además, él llevó de asesor a Alfredo Asfura y él siempre ha hecho lo que la mayoría decía, nunca tenía una voz propia. No tenía ninguna duda que Jadue caería", sentenció.