Sam Sunderland debió abandonar y se convirtió en una de las más importantes bajas.
AFP
AREQUIPA.- A lo largo de su historia, el Rally Dakar es una carrera dura y que no conoce de compasión a la hora de los retiros de los pilotos.
Pero la presente edición, en particular, ha sido mucho más despiadada cuando recién van cinco etapas de las 14 hasta la meta en Córdoba.
¿Por qué? En la actual competición, que todavía está pasando por Perú a la espera de entrar a Bolivia, se han producido 63 abandonos, entre los cuales se encuentran bajas de varios pilotos de punta, como los vigentes campeones en motos y quads.
Hoy miercóles la categoría de autos sufrió el retiro de un ilustre: El francés Sebastien Loeb, multicampeón del campeonato de Rally Mundial, dijo adiós, luego de que quedara atrapado en una trampa de arena en la duna. Otro que tuvo que despedirse fue Joan Nani Roma, debido a un accidente.
Pero en la categoría de motos también se produjo una mala noticia: El vigente monarca, el inglés Sam Sunderland, abandonó por una fuerte lesión lumbar en la cuarta etapa, tras una caída.
Asimismo, en cuadriciclos se despidió el campeón defensor. El ruso Sergei Kariakin se fracturó el brazo tras una golpe fuerte y le dejó la pista abierta al chileno Ignacio Casale.
Finalmente, en lo que refiere a los chilenos, Cristóbal Guldman, el competidor nacional de la categoría malle moto, también se retiró tras ser rescatado en helicóptero luego de romper su moto Kawasaki.
Así las cosas, habrá que ver cómo sigue la mano en las nueve etapas restantes. Quedan muchos kilómetros y seguramente la rudeza del Dakara seguirá tachando nombres...