SANTIAGO.- Aún no comienza y
la nueva Copa Davis ya se ve inmersa en una polémica. Y los protagonistas son dos personajes destacados en el mundo del deporte:
Roger Federer y Gerard Piqué.
El tenista y el futbolista se han visto enfrentados con quemantes declaraciones a raíz del renovado formato del histórico torneo, que está a cargo de la empresa que lidera el defensa del Barcelona.
El último "round" de esta contienda ocurrió ayer miércoles en el marco del lanzamiento oficial del campeonato, donde el zaguero español cuestionó la condición física del suizo.
"Federer es un caso diferente porque no juega mucho la Davis. Sus piernas dan por lo que dan. Él históricamente ha priorizado otras competiciones", repasó Piqué.
Pero todo esto venía de antes, específicamente cuando el suizo mostró públicamente su malestar por el hecho de que un futbolista, como es el caso del defensa, entrara en el mundo del tenis.
"No he hablado con él, pero admito que resulta extraño ver a un futbolista entrometerse en el negocio del tenis. Y cuidado, la Copa Davis no puede convertirse en la Copa Piqué", dijo Federer.
Y poco antes el ex número uno del mundo había sido claro: "
La Copa Davis nunca será lo mismo, me siento triste porque no volveremos a tener el torneo que estábamos acostumbrados. Nunca será lo mismo para la próxima generación".
Estas declaraciones no serían las únicas de Federer, pues hace sólo unos días nuevamente repasó el torneo que lidera Piqué.
"No creo que esto haya sido diseñado para mí. Esto fue diseñado para la futura generación de jugadores. El tiempo dirá si el cambio fue positivo o no, aunque claramente, nunca volverá a ser el mismo", lanzó.
Precisamente estos últimos dichos fueron los que generaron la reacción del defensa del Barcelona en el lanzamiento de la nueva Copa Davis agrandando aún más un cruce que hoy parece lejano a resolverse.
