El ex jugador brasileño fue detenido por segunda vez en menos de una semana en Paraguay.
AFP
Los problemas judiciales para Ronaldinho no paran. El ex futbolista brasileño y su hermano Roberto pasarán la noche de este viernes en un cuartel de la policía paraguaya tras ser detenidos nuevamente en un hotel en Asunción por orden de la Fiscalía general, según informaron fuentes oficiales.
"La Fiscalía General libró orden de detención, imputó al jugador Ronaldinho por uso de documento público de contenido falso y solicita medida cautelar de prisión preventiva", expresó un tuit del Ministerio Público.
Fuentes de la Fiscalía informaron que los hermanos serán convocados para una audiencia de imposición de medidas este sábado.
Los hermanos Ronaldo y Roberto Assis Moreira ya habían sido detenidos el miércoles y habían terminado de comparecer por siete horas, retirándose del Palacio de Justicia. En la instancia, el juez de la causa anunció que ambos estaban "en pleno goce de su derecho de libertad".
Sin embargo, poco menos de dos horas después ingresaron en una camioneta cerrada a la sede de la Agrupación Especializada de la Policía.
El abogado de los detenidos, Adolfo Marín, dijo no entender el motivo de la detención. "No sabemos bajo qué figura fueron detenidos", sostuvo.
La fiscala general del Estado, Sandra Quiñónez, decidió rectificar un pedido de "criterio de oportunidad" a favor del exjugador y cambió a los fiscales de la causa que habían recomendado al juez dejarlos fuera del proceso por uso de pasaporte paraguayo adulterado.
Seguidamente un nuevo fiscal, Osmar Legal, ordenó la detención del ídolo brasileño y su hermano.
Ronaldinho y su hermano Roberto había exhibido documentos paraguayos de identidad falsos al arribar el miércoles al aeropuerto internacional de Asunción.
El ex Barcelona y PSG, Balón de Oro 2005, debía desarrollar una agenda humanitaria con niños y tenía previsto inaugurar un casino además de lanzar un libro de memorias, cuando la Policía denunció su ingreso con pasaporte adulterado.
Por el incidente fueron imputados el empresario brasileño Wilmondes Sousa Lima y las paraguayas María Isabel Gayoso y Esperanza Apolonia Caballero, todos detenidos.
Ronaldinho y Roberto acababan de cambiar de hospedaje (del Yacht y Golf Club pasaron al Sheraton) cuando aparecieron en el hotel policías vestidos de civil para proceder a su captura.