Mike Tyson siempre fue reconocido tanto por sus performance arriba del ring como por sus excentricidades fuera de él. De hecho, una de las razones por las que ha sido más criticado, fue por la decisión de tener un tigre de bengala como mascota.
Animal que ya no tiene, ya que tuvo que venderlo debido a un dramático accidente, el cuál reveló hace algunos meses. En 2019, Tyson contó que Kenia -nombre del tigre- "le arrancó el brazo a alguien", sin dar más información.
Sin embargo, en las últimas horas el ex boxeador entregó detalles de lo ocurrido. A través de Instagram y en una conversación con el rapero Fat Joe, el estadounidense contó la verdad,
negando que el animal se haya escapado de su jaula y reconociendo que una mujer se metió en su propiedad.
"Alguien saltó la cerca justo donde estaba el tigre y empezó a jugar con él. El animal no conocía a esta mujer y ocurrió un feo accidente", dijo Tyson, quien además admitió que "cuando vi lo que el tigre le hizo a su mano, yo tenía mucho dinero en aquel entonces, entonces le di 250 mil dólares porque ella estaba jod...".
Y agregó: "Uno no puede creer lo que (los tigres) le pueden hacer a la carne humana, yo no tenía idea", aún recordando la magnitud de las heridas de la mujer.
Tyson reconoce que: "Yo era muy tonto en ese entonces. No hay forma de domesticar a estos felinos en un cien por ciento, no hay manera de que eso pase. Ellos te matan por accidente, no es que tratan de hacerlo, lo hacen por accidente (...) Son demasiado fuertes, especialmente cuando juegas rudo con ellos. Los golpeas y de repente ellos te golpean a ti, y estás muerto".
Es por esto que se vio forzado a vender su tigre. "Sentía un gran afecto por ella. La cuidé, dormía con ella, la tuve en mi habitación", dijo tiempo atrás.
