Una relación que no da para más.
Reuters
Hace rato que Christian Eriksen dejó de ser relevante en el Inter. Enterrados quedaron esos días en que llegó como fichaje estrella de Antonio Conte. El danés ahora vive una pesadilla.
El entrenador italiano ha dejado en claro que apenas cuenta con el volante. No sólo porque a veces ni siquiera es considerado como un cambio, también porque las señales son cada vez más negativas.
La última fue el pasado sábado.
El DT mandó al mediocampista a la cancha cuando el reloj marcaba el minuto 91 y el partido ya estaba 3-1 a favor del club lombardo.
"Sometido a la tortura habitual: dos, inútiles, minutos le dio Conte", sentenció el diario La Gazzetta dello Sport por el ingreso del danés por Alexis Sánchez.
"Conte quiere gente animada por el fuego sagrado competitivo y Eriksen no es exactamente uno de ellos. Una cosa es eso y otra la humillación que sufrió ante el Bologna", escribió el sitio Inter News.
La cara del volante una vez finalizado el partido frente al equipo de Gary Medel lo decía todo. Harto, molesto. Entró a nada.
Lo que ha pasado demuestra que la relación con Conte ya no da para más. Y así lo ven en Italia. Aseguran que Eriksen se irá del club en enero, cuando se abra el mercado de fichajes.
"A nivel de temperamento y carácter el danés no se ajusta a lo que quiere Conte. El club es consciente de eso y ahora está buscando la mejor solución para ambas partes. En el último mercado, la directiva se había cerrado a cualquier préstamo, pero ahora en enero se buscará la mejor solución, ya sea préstamo, intercambio o venta. La aventura de Eriksen en los nerazzurri, en cualquier caso, está llegando al final", señaló el reconocido periodista italiano, Gianluca Di Marzio, en Sky Sports.
Conte se refirió al caso del volante el pasado sábado tras la victoria sobre el Bologna. El DT le bajó el perfil.
"Mi relación con Christian es la misma que la que tengo con todos los demás jugadores. No me cansaré de explicarlo, las decisiones que tomo son por el bien del Inter. Lo último que hago es mirar por la cara del jugador, se trata de todo lo demás", argumentó.
Mientras, al danés ya se le relaciona con clubes como el PSG, Bayern Munich y Atlético de Madrid. También se dice que podría volver a la Premier, donde ya estuvo en el Tottenham.