El puño en alto y la sonrisa en un rostro que todavía parece de niño. Ese carácter frugal del pelirrojo Jannik Sinner enmascara a un competidor brutal. El prodigio italiano fue la gran revelación del circuito ATP en el 2020.
"Sinner es un gran jugador... uno de los candidatos a ser el número uno del mundo. A pesar de su juventud, está mostrando gran madurez en el juego", expresó Toni Nadal, tío y ex entrenador de "Rafa".
Con 18 años era el más joven dentro del top 100 y con 19 el más joven en ganar un título ATP desde el 2008. La última temporada fue además el de mayor ascenso. Empezó en el puesto 78° y terminó en el 37°.
En su debut en Roland Garros, se convirtió en el primer nacido en 2001 en llegar hasta cuartos de un Grand Slam. Ahí se enfrentó a Nadal. Pese a que perdió en sets corridos, muchos creen que fue el partido más difícil para el español en su última campaña en la arcilla parisina.
Cinco años atrás Sinner no hubiese imaginado este presente. No porque no creyese en su talento. El tenis era solo un entretenimiento. Creció en un valle alpino cerca de Austria y desde niño practicó esquí. Llegó a ser campeón infantil de Italia. Ese deporte lo une con Novak Djokovic. El actual número uno del mundo también lo practicó.
"Son deportes muy diferentes, pero el equilibrio es muy importante, tanto en uno como en el otro. Puedo llegar a entender por qué Novak dijo que haber esquiado lo ayudó para jugar al tenis", dijo.
Llegó a la academia del experimentado Ricardo Piatti y ahí lo comenzaron a pulir con cincel. Ya a los 15 años competía en torneos futuro. En 2019 llegó como invitado al trofeo Masters de la nueva generación y lo terminó ganando.
"Tiene excelentes cualidades técnicas, en todos sus golpes, la potencia y ritmo de la pelota, la movilidad y la velocidad de sus piernas. Para los profesionales, es el tenista más fuerte que haya existido entre los menores de 20 años. Depende de él confirmar las enormes expectativas. Durante mucho tiempo ha sido considerado el heredero de Federer, Nadal, Djokovic y Murray en el circuito. Esto no significa que se convertirá en ello, porque la carrera de un jugador de tenis está salpicada de muchas variables, físicas y mentales", expresó el ex tenista Renzo Furlan.
Con Roger Federer en la mente
En algún lugar de Roma, Federer entrenó con Sinner antes de que el chico se hiciera famoso. "Es bueno", habría dicho el suizo tras esa práctica.
Al igual que Federer, Sinner nunca parece perder la calma. Juega con la derecha y le gusta pegar el revés a dos manos.
Fue más rápido que su ídolo en ganar su primer ATP. Derrotó a Vasek Pospisil en Sofía. El duelo fue dramático. "Prefiero esto que ganar 6-1 y 6-1", afirmó.
"Jannik Sinner es puro talento, en términos técnicos, mentales y físicos. En mi opinión, está yendo paso a paso, ganando un pequeño título en Sofía hasta ahora y sabiendo lo duro que tiene que trabajar para llegar a la cima. Para mí, su mejor resultado fue en Roland Garros, cuando desafió a Rafael Nadal por dos sets", manifestó esta semana el coach de Federer, Ivan Ljubicic.
Sinner ha dicho que le gustaría que Federer fuese eterno. Pero sabe que se le acaba el tiempo al de Basilea. Antes de que eso ocurra, tiene algo en mente: "Sueño con ganarle en la cancha central de Wimbledon".
