Andy Reid agrandó su leyenda el pasado domingo. Los Chiefs consiguieron la victoria en el Super Bowl LVIII y el coach ganó su tercer trofeo Vince Lombardi.
Estos años de éxitos contrastan de manera brutal con su pasado. Reid ha tenido una vida en la que ha debido superar varios obstáculos y tragedias con sus hijos.
El bigotudo tuvo su primer trabajo a tiempo completo como entrenador en 1983 en la Universidad Estatal de San Francisco. Era un cuadro de la División II de la NCAA, con un presupuesto exiguo e instalaciones en mal estado.
Reid trabajaba 14 horas diarias para el equipo, pero recibía poca paga. No le alcanzaba para vivir y tuvo que vender hot dogs para mantener a su familia.
"Fue una gran experiencia. Te da ese factor de respeto hasta donde estás ahora. Lo aprecias. No das por sentado que estás aquí. Te sientes muy privilegiado por estar en esta posición", afirmó cuando ya era un hombre de éxito en la NFL.
Luego de dejar San Francisco, se fue como asistente a Northern Arizona University. Ese trabajo lo consiguió de manera inusual. Se enteró que había una vacante y que el entrenador iba hacia Sacramento en avión. Tomó su auto, condujo dos horas y lo esperó en el aeropuerto. "Coach, quiero ese puesto", soltó.
Ya en los años noventa se produjo su llegada a la NFL. Se incorporó al cuerpo técnico de Mike Holmgren en los Green Bay Packers.
En esa época, Reid se levantaba en la madrugada y a las cuatro de la mañana se iba a trabajar. Regresaba para llevar a sus hijos al colegio. Repitió la rutina una y otra vez por diez años.
Le fue muy bien en los Packers. En 1995 conquistó el Super Bowl al vencer a los Patriots.
Cuatro años después por fin le llegó la oportunidad que tanto esperaba: ser entrenador principal. Fue contratado por los Philadelphia Eagles. Hubo críticas al principio, los fanáticos esperaban alguien más experimentado, pero silenció bocas con grandes números.
Estuvo 13 temporadas con los Eagles, obtuvo seis títulos divisionales y llegó al Super Bowl XXXIX. Perdió frente a los New England Patriots de Tom Brady.
En 2013 firmó con Kansas City. "Big Red", junto a Patrick Mahomes, ha construido una dinastía histórica. Ha llegado al duelo por el título en cuatro de las últimas cinco temporadas y es el quinto entrenador en jefe con tres anillos de Super Bowl junto a Bill Belichick, Chuck Noll, Bill Walsh y Joe Gibbs.
La terrible situación con sus hijos
Reid está casado con Tammy Reid desde 1981 y procrearon cinco hijos: Garrett, Britt, Drew Ann, Crosby y Spencer.
Pero el estratega tenía poco tiempo para estar con su familia mientras estuvo en los Eagles. No solo era el head coach. También era el vicepresidente ejecutivo de operaciones y director general. Eso le trajo consecuencias.
En 2007, sus hijos Garrett y Britt fueron detenidos por posesión de estupefacientes. El juez definió la casa de los Reid como un "emporio de drogas".
Se descubrió que Britt no solo consumía, si no que también distribuía las sustancias. Ese mismo año, además, había amenazado a una persona en la calle con un arma no registrada en medio de una discusión.
Cuando pudo, el coach Reid se llevó a trabajar a Garrett y Britt con él en los Eagles. Eran sus asistentes. Hubo algo de tranquilidad por un tiempo, pero en agosto de 2012 se produjo un hecho lamentable.
La policía de Pensilvania encontró el cuerpo sin vida de Garrett. La autopsia estableció que murió por sobredosis.
"Es una situación triste, mi hijo ha estado luchando durante varios años contra esto, toda nuestra familia ha estado luchando. Eso no significa que dejes de amar a tu hijo. Eso no es lo que haces. Lo amas y muchas familias enfrentan este tipo de cosas", afirmó "Big Red".
Britt siguió trabajando con su padre cuando éste llegó a los Chiefs. Pero en 2021 su vida daría un dramático giro.
Iba manejando bajo la influencia del alcohol y ocasionó un accidente vial que dejó a una niña de cinco años en pésimas condiciones. Lo condenaron a tres años de cárcel.
"Mis plegarias y pensamientos están con todas las personas involucradas", dijo el coach Reid. Poco tiempo después perdió el Super Bowl contra Tampa Bay.