SANTIAGO.- San Francisco ya es una de las ciudades estadounidenses más caras para los locatarios de departamentos y las empresas que buscan espacio para oficinas. Ahora, la zona tiene una nueva distinción: es el lugar más caro del mundo para que los visitantes pasen la noche.
El precio medio por una habitación de hotel en la ciudad californiana subió 88% en el último año hasta US$ 397 la noche, según un índice recopilado por Bloomberg de los 100 centros financieros mundiales más importantes.
La ciudad se ubica por delante de Ginebra, donde las habitaciones hacen gastar a los viajeros hasta US$ 292 la noche, y Milán, US$ 271. Chicago, con tarifas de US$ 240, empata con Miami siendo las segundas ciudades estadounidenses más caras.
Los costos en alza están siendo impulsados por el auge de la industria tecnológica en la región, un mercado de trabajo en alza y una escasez de construcción de hoteles dado que los promotores inmobiliarios se centran en edificios de oficinas y residenciales –una combinación que permite a los operadores ser agresivos con los precios.
"La afluencia de empresas de tecnología a San Francisco ha sido enorme, y con ella este nuevo viajero emergente, el ‘millennial’, que busca experiencias en el centro", dijo Chuck Pacioni, gerente general del San Francisco Marriott Marquis, en relación a los personas menores de 30 años que crecieron junto con la tecnología.
"Muchos de ellos pueden viajar por trabajo a Silicon Valley, pero en lugar de alojarse en un hotel suburbano, quieren estar en la ciudad por la cultura y las experiencias", explicó.
Las tarifas elevadas que están pagando los visitantes por las habitaciones tentaron a los inversores. La unidad de alojamiento de Loews Corp. compró el Mandarin Oriental San Francisco Hotel en abril, dos meses después de que Hilton Worldwide Holdings Inc. adquirió el Parc 55 de la ciudad.
Mercados más importantes
San Francisco es uno de los 25 mercados de alojamiento con un incremento interanual en las tarifas por habitación, muestran datos de Bloomberg.
Chicago tuvo el segundo aumento más grande, con un incremento de 64%, seguido por un salto de 47% en Milán y 33% en Kuala Lumpur.
Entre las ciudades estadounidenses donde cayeron los costos de hotelería, Nueva York experimentó la mayor disminución, con una caída de 13% hasta un precio promedio por habitación de US$ 202.
En Europa, los hoteles parisinos se contaron entre los mayores perdedores, con una caída de 37% hasta US$ 146.
Los precios por noche en Budapest cayeron más de la mitad, la mayor declinación mundial, hasta US$ 85. Globalmente, el mercado más barato es Hanoi, Vietnam, donde las habitaciones promedian US$ 62 la noche.